«Ya tengo la costumbre, soy mayor de 65 años y ahora que se habla de que se puede mezclar con el demonio del coronavirus, más motivo». Algunos pacientes lo tienen muy claro. Son fieles a la cita. Saben que son perfiles de riesgo, han probado la efectividad de la vacuna y año tras año acuden para recibir ese pequeño pinchazo en su centro de salud. Este año, el coronavirus les da un motivo más. Ayer fueron los primeros en responder a la llamada en el inicio de la campaña de vacunación de la gripe. Sin embargo, este año Salud no se conforma sólo con ellos. Quiere evitar que la covid y la gripe estacional convivan y para ello quiere llegar a más pacientes que nunca en Balears.
Mientras el mundo vive pendiente del desarrollo de la vacuna del coronavirus, la vacuna que ya se está distribuyendo entre la población de las islas es la de la gripe. Después de una primera semana en que ya empezó a suministrarse entre personal sanitario y residencias de ancianos, ayer empezó la campaña para los pacientes de riesgo. Los centros de salud de las islas recibieron a los primeros pacientes. Muchos de ellos, habituales a la cita.
«Llevo veinte años viniendo», relataba ayer Álvaro Blanco, uno de los primeros pacientes en acudir al ambulatorio de Escola Graduada para vacunarse. Sus motivos: «He tenido dos transplantes, he sufrido dos infartos y me lo recomienda el médico», explicó, señalando que aunque no fuera por la covid, habría acudido a vacunarse. Sin embargo, también ve en el coronavirus un motivo más: «Hay que confiar en los médicos. Lo que no hay derecho es a contagiarse. Quien no se vacune, que se atenga a las consecuencias», alerta este paciente, que llamó para pedir cita la primera semana.
Como él, Catalina Vicens. También lleva acudiendo a vacunarse de la gripe varios años, aunque el pasado, no le dio tiempo y cuando pidió cita ya no quedaban dosis. En su caso, tiene «una enfermedad crónica» y, por ello, se apresuró en pedir cita la semana pasada. Ayer era de las primeras.
Ascensión Hernández, de 75 años y con hasta once operaciones, explica que también acude «cada año». «Este año también por lo de la covid», confiesa.
«Ya tengo la costumbre, soy mayor de 65 años y ahora que se habla de que se puede mezclar con el demonio del coronavirus, más motivo», comparte otro de los primeros pacientes en vacunarse este año, Pep Escudero.
El resto, en diciembre
Para evitar aglomeraciones, este año se ha previsto vacunar a un paciente cada cinco minutos, en lugar de uno por minuto. Además, durante las dos primeras semanas los centros de salud de Palma abrirán los fines de semana.
La prioridad ahora es llegar al máximo de cobertura de los perfiles de riesgo y a partir de diciembre suministrar las dosis restantes al resto de la población que se quiera vacunar. Salud distribuirá este año 262.710 dosis de vacunas contra la gripe, que permiten alcanzar un 75 por ciento de la población de riesgo. El año pasado se vacunó un 45,5% de estos perfiles.
