La Audiencia Provincial ha condenado al Govern y al Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) por las «negligencias» en la gestión de los seguimientos a dos menores tuteladas que cometieron un violento robo en Palma. El tribunal acusa a ambas instituciones de no actuar ante las advertencias previas de los técnicos sobre la deriva de las adolescentes. «Nada se hizo», reprocha el tribunal de la sección segunda. El fallo considera a ambas administraciones responsables civiles del atraco y las obliga a indemnizar a la víctima.

El 22 de septiembre de 2017 las dos menores tuteladas asaltaron a una mujer en un parque de Palma. La tiraron al suelo, le dieron tirones de pelo y le propinaron varias patadas hasta conseguir arrebatarle el bolso, en el que llevaba 80 euros. La víctima sufrió varias heridas y precisó asistencia médica.

Las chicas fueron condenadas por un juzgado de menores por delitos de robo con violencia y lesiones a sendas penas de un año de libertad vigilada. El fallo declaró responsables civiles al Govern y el IMAS, que tenían la tutela de las chicas en ese momento, y les ordenó indemnizar a la mujer con 531 euros.

La Abogacía de la Comunidad Autónoma recurrió ante la Audiencia para no abonar esta compensación. Argumentó que cuando se produjo el atraco una de las menores estaba disfrutando de un permiso de fin de semana, concedido por el centro de internamiento, en casa de su madre y que la otra estaba viviendo con una familia de acogida. El tribunal de la sección segunda ha desestimado el recurso, en una sentencia que lanza duros reproches a las dos instituciones.

La Audiencia señala que en el caso de la menor internada el equipo técnico había informado que desde dos meses antes «presentaba una elevación de los parámetros disfuncionales de manera significativa». La chica tenía «abundantes» antecedentes delictivos y el tribunal concluye que «no debió dársele el permiso concedido».

Respecto a la que vivía con una familia de acogida, los magistrados exponen que el Equipo de Medio Abierto «llevaba meses avisando al IMAS de que no cumplía adecuadamente» las condiciones para permanecer en libertad. En junio llegó a ser advertida por ello, pero hizo caso omiso. Dos semanas antes del atraco, tanto el equipo técnico como la fiscalía solicitaron al IMAS su reingreso urgente en un centro de internamiento. «Nada se hizo», reprocha la sentencia.

El fallo considera que las advertencias previas de los técnicos cayeron en saco rato, lo que «denota una negligencia en la gestión de los seguimientos a estas dos menores». Con todo, el tribunal desestima el recurso y confirma la responsabilidad de ambas instituciones.