El conseller de Educación, Martí March, sostuvo ayer en el Parlament que el adoctrinamiento político en las aulas de Balears «no es un problema y es inexistente» salvo «algunas prácticas por parte de algunos profesores inadecuadas» que son minoritarias. Precisó que cuando esto ocurre, inspección educativa elabora un informe que si es preciso lleva ante la Fiscalía de Menores sin que hasta ahora se haya producido ningún pronunciamiento en contra. «No hay ninguna sentencia judicial por adoctrinamiento en las aulas de Balears», resaltó March quien instó a quien tenga pruebas de lo contrario a acudir a los tribunales. El conseller efectuó estas declaraciones en su comparecencia en comisión parlamentaria a petición de Vox, que dejo claro que en su opinión sí existe adoctrinamiento.
March insistió en defender «a los docentes y equipos directivos» a los que a su juicio se pone en cuestión al plantear que existe un adoctrinamiento en el sistema educativo público balear de manera global. «A este conseller no le temblará la mano si ha de hacer un expediente a alguien por algo inadecuado, pero debe haber pruebas y evidencias ya que nadie es culpable hasta que no se demuestra, aunque aquí algunos acusan sin pruebas», dijo en referencia a Vox.
El líder del partido de la ultraderecha, Jorge Campos, recordó que la petición de comparecencia de March la efectuó en febrero, cuando se hizo pública la grabación de una profesora descalificando en clase a Vox. March dijo que no había escuchado esa grabación. El conseller tampoco se pronunció sobre otros casos de actitudes o carteles en su mayoría procatalanistas que enumeró Campos, quien entre otras cuestiones arremetió contra la «imposición» del catalán. «La educación pública balear está en manos de la inmersión en catalán», sostuvo Campos.
March recordó que en Balears se aplica el decreto de mínimos aprobado por el Govern del PP de Jaume Matas, una cuestión en la que incidió cuando el popular Juan Manuel Lafuente también consideró que, si bien no es generalizado, si hay casos de adoctrinamiento y criticó al conseller por instar a acudir a los tribunales, al entender que su departamento debería actuar con más contundencia. «Una cosa es un delito y otra el adoctrinamiento», dijo el diputado del PP.
Patricia Guasp, de Ciudadanos, también consideró que hay casos de adoctrinamiento en Balears, aunque la respuesta más contundente de March fue para Lafuente. «Ustedes no nos pueden dar lecciones porque nosotros actuamos, pero no perseguimos docentes», espetó al diputado del PP tras recordarle las tensiones que provocó el Govern de José Ramón Bauzá en el sector de la educación.
March recibió el apoyo de los representantes del PSIB, Podemos y Més y también el de la portavoz de El Pi, Lina Pons, quien decidió abandonar la comisión tras su intervención con el fin de «no contribuir más a este show, a este circo mediático» de Vox.
