Un grupo de padres del colegio de Sant Vicenç de Paul, que está ubicado en la zona de s’Arenal de Llucmajor, amenaza con dejar de llevar a sus hijos a clase, porque cerca del centro está ubicado un hotel donde se hospedan enfermos de covid. 

Los padres consideran que no se trata del lugar más adecuado para trasladar a las personas que están contagiadas, ya que se puede poner en peligro la salud de los más pequeños que acuden a este centro escolar.

Este malestar no solo lo tienen los padres, sino también los propios trabajadores del colegio, porque mantienen que también están corriendo el mismo peligro de contagiarse. Por esta razón, tanto el colectivo de trabajadores, como los representantes de los padres de alumnos, con el apoyo del propio ayuntamiento de Llucmajor, realizarán una petición formal a las autorizaciones para que se contrate otro establecimiento, para que funcione como hotel covid, pero que esté mucho más alejado de la zona educativa.

Se da la circunstancia, además, que este hotel se encuentra relativamente cerca de una plaza de la zona de s’Arenal, que en estos momentos algunos alumnos está utilizando como zona de patio. Este establecimiento depende del Consell de Mallorca, y ya se encuentran en estos momentos un numeroso grupo de personas que han dado positivo a las pruebas de contagio. Estos infectados desarrollan la cuarentena en estas instalaciones hoteleras y, en teoría, tienen prohibido salir a la calle para mantener contacto con otras personas.

Los padres también se han quejado de que ningún responsable político les hubiera informado que el Consell iba a contratar este hotel para trasladar allí a enfermos de covid.

Migrantes

Precisamente, entre los huéspedes que fueron trasladados el pasado viernes a este establecimiento hotelero de s’Arenal se encuentran algunos de los migrantes que esta semana han llegado a Mallorca en patera. A estos extranjeros se les realizó la prueba de contagio y se comprobó que seis de ellos se habían infectado por el virus, aunque ninguno de ellos mostraba síntomas. Las autoridades sanitarias acordaron que tanto los infectados, así como los compañeros que viajaban en la misma patera, tendrían que realizar la cuarentena para evitar que el virus se extendiera. Y se consideró que el hotel contratado en s’Arenal cumplía con las condiciones para pasar la cuarentena.