El abogado de Iñaki Urdangarin en el caso Nóos, Mario Pascual, defendió que la Audiencia de Palma rechace el recurso de la Fiscalía y conceda el tercer grado penitenciario a su cliente --una resolución que se publicará previsiblemente como muy tarde mañana--, como ya tienen el expresidente balear Jaume Matas y su exsocio Diego Torres. Pascual lamentó este martes que "otras personas en igualdad de circunstancias y de trato lo tienen desde hace meses. Es difícil de entender e incluso de aceptar" esta diferencia, dijo en alusión a los también condenados por el caso Torres y Matas.

"No pretendo en absoluto que ellos no lo tengan; al contrario: nos queremos igualar a ellos", aseguró sobre estos también condenados, que están en una situación penitenciaria distinta a la de Urdangarin porque la Fiscalía no recurrió su tercer grado ante la Audiencia de Palma.

El abogado de Urgandarin espera que obtenga el tercer grado de forma inminente

Pascual explicó que el tercer grado permitiría a Urdangarin pasar los fines de semana fuera de la cárcel, y entre semana ir a la prisión solo a dormir, y ha deseado una resolución favorable: "Esperamos que sea así, confiamos". Detalló que, para la petición del régimen de semilibertad, Urdangarin cuenta con una oferta laboral para trabajar en el centro Don Orione en Pozuelo de Alarcón (Madrid), donde ahora presta voluntariado y donde cobraría 900 euros mensuales.

Pascual constató también la posibilidad de que la Audiencia de Palma no conceda el tercer grado pero sí "una posibilidad inferior": aplicarle el artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario, que le permitiría salir de la cárcel un fin de semana cada mes. En cualquier caso, Urdangarin tendrá en diciembre la revisión de grado que se hace a todos los presos cada seis meses: "Si todas las cosas no salieran bien, habría que empezar en diciembre otra vez todo el proceso", dijo Pascual sobre la posibilidad de volver a pedir la semilibertad a finales de año, lo cual se resolvería durante 2021.

Urdangarin cuenta con una oferta laboral para trabajar en el centro Don Orione en Pozuelo de Alarcó, donde cobraría 900 euros mensuales.

Además, en mayo de 2021 el marido de la Infanta Cristina habrá cumplido ya la mitad de su condena, lo que según él implicaría recibir el tercer grado, porque la decisión "ya no sería discrecional; sería obligatorio".

Mario Pascual explicó que la decisión de que esté en la cárcel de mujeres de Brieva (Ávila) responde a necesidades de seguridad y no a su voluntad, porque allí está aislado, y, al preguntársele si le puede afectar la salida de España del Rey emérito Juan Carlos I, contestó: "Nada que ver".