“La presidenta (Francina Armengol) me pidió si podía ayudar echando una mano y aquí estoy, ya que creo que la Autoridad Portuaria es una institución importante para Balears con proyectos de relevancia para las ciudades”. Son palabras del expresidente del Govern, Francesc Antich, después de conocerse que el próximo lunes el Consell de Govern lo propondrá como presidente de la Autoridad Portuaria de Balears en sustitución de Juan Gual de Torrella, apartado después de su detención por un presunto caso de corrupción a finales del pasado mes de julio.

El nombramiento de Antich deberá ser ratificado por el ministerio de Transportes y Movilidad que dirige el ministro José Luis Ábalos, ya que los puertos estatales son de su competencia. De todas formas, el nombramiento siempre ha sido autonómico y nunca el Ministerio ha puesto reparos a la persona que propone el Govern para dirigir la Autoridad Portuaria de Balears (APB).

Sobre los hechos que obligaron a apartar del cargo a su antecesor, Juan Gual de Torrella, Antich indicó que “sé que son momentos de dificultad, pero todo está bajo secreto de sumario y no quiero pronunciarme hasta aterrizar allí, informarme y conocer bien la situación”.

Antich recuerda que los puertos “son la puerta de entrada de las islas y un ejemplo de cogestión entre Govern y Estado”

El expresident no escondió su ilusión ante el nuevo reto que afronta: “Los puertos son la puerta de entrada a Balears y la APB es un ejemplo de la cogestión entre el Govern y el Estado. Me gustaría que los puertos no estuvieran de espaldas a las ciudades y creo que hay proyectos muy importantes, como es el de la fachada marítima de Palma, donde el puerto dará un impulso a la ciudad”.

Antich tuvo que ceder su puesto de senador autonómico designado por el Parlament en favor de Més per Mallorca para poder formalizar el Pacto de Izquierdas en 2019. Después, Armengol lo nombró comisionado autonómico en Madrid, un cargo al que el propio Francesc Antich renunció al no tener prácticamente competencias que ejercer. 

Hace un año que se incorporó a su plaza de funcionario como abogado en el Patronato Municipal de la Vivienda del ayuntamiento de Palma, después de muchos años en política. “En el patronato se han portado muy bien conmigo y me ha servido este año para volver a mi verdadera profesión como abogado”, indicó el expresident del Govern.

Ahora le tocará dirigir una de las instituciones potentes y bien remuneradas, pero también deberá acometer en la APB cambios importantes para hacer frente a los problemas que generaron la salida de su antecesor. La investigación judicial que pesa sobre la Autoridad Portuaria por el presunto caso de corrupción será uno de los principales temas que deberá afrontar el expresident.

Armengol tira de su mentor

La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha ido a lo seguro con el nombramiento de Francesc Antich. Ha sido su gran mentor en política desde sus inicios. Se trata de una persona de su máxima confianza, conoce a la perfección las instituciones al haber presidido el Ejecutivo Autonómico entre 1999 y 2003 y entre 2007 y 2011. De 2011 a 2019 fue el senador autonómico designado por la izquierda. 

Ciudadanos lamentó ayer la propuesta de nombramiento de Antich. La portavoz adjunta, Patricia Guasp, apuntó: “Responde más a un compromiso político que a querer contar con el mejor gestor para este cargo”. Desde Vox calificaron la decisión como una “broma de mal gusto”.