La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) y la Asociación de Cadenas Hoteleras (ACH) lamentaron ayer que el "enorme esfuerzo" realizado por las empresas para abrir sus establecimientos con seguridad ante la covid-19 "ha sido en vano".

En un comunicado al hilo de la decisión del turoperador británico Jet2 de aplazar hasta 2021 sus operaciones con Baleares, las patronales hoteleras se lamentan de la evolución negativa de la temporada turística, lastrada por la cuarentena impuesta por el Reino Unido y la recomendación de Alemania de no viajar a España, a excepción de Canarias.

La compañía británica Jet2 anunció el jueves la suspensión de los vuelos y paquetes vacacionales a Balearespara el resto del verano 2020 (hasta el 30 de noviembre de 2020), debido a la continua incertidumbre causada por la pandemia de covid-19 y a las recomendaciones de no viajar y la cuarentena impuesta a viajeros procedentes de España del Gobierno del Reino Unido.

Las patronales turísticas coinciden en que hubiera sido preferible que Jet2 fuera adaptando su operativa a las circunstancias sanitarias semana a semana, como han hecho otros turoperadores.

"Durante este tiempo, los establecimientos hoteleros hemos ido adaptándonos a los protocolos de prevención higiénico sanitarios, a la constante modificación de normativas y regulaciones y a las nuevas condiciones de mercado y de comercialización. Nos hemos flexibilizado al máximo y adaptado la operativa para ir ofreciendo un servicio confortable a nuestros clientes bajo el paraguas de la normativa", señalan las agrupaciones empresariales.

Sin embargo, lamentan, "una acumulación de circunstancias y de medidas" ha puesto muy difícil que las empresas puedan mantener su actividad".

La de Jet2 es "otra decisión más que evidencia la gran cantidad de dificultades que van a tener que afrontar los pocos establecimientos hoteleros que este verano habrán podido desarrollar una muy escasa actividad".

Empresas al límite

Por todo ello, reclaman al Estado una prórroga de los ERTE adaptada a la realidad turística, que se reconozcan las prestaciones a los trabajadores fijos discontinuos y, además, "rebajar las cargas fiscales y tributarias".

"De otra manera se producirá una gran destrucción de tejido empresarial y, consecuentemente, del empleo. Desde FEHM y ACH llevamos semanas reivindicándolo, pero han hecho oídos sordos a estas peticiones. Las empresas están al límite", concluyen.