El Ingreso Mínimo Vital, una de las ayudas que el Ejecutivo central aplicó para paliar los efectos de la covid en las familias más vulnerables, no está llegando a los ciudadanos de las islas. Se estima que alrededor de 2.300 personas en Balears siguen esperando para recibir esta prestación, aunque el Ministerio no ha ofrecido datos oficiales ni del número de demandantes ni tampoco de las personas que ya la han ingresado.
Ante esta situación, muchos ciudadanos lamentaron las dificultades que atraviesan para obtener esta ayuda en una situación económica complicada . "Como no me den esta ayuda no sé cómo lo voy a hacer, si es que ahora no hay trabajo. No sé cómo podemos vivir; tenemos familia, el alquiler, la situación es muy complicada", afirmó Samir, una de las personas que solicitan esta ayuda. Un argumento que apoyó Rubén Martínez, otro ciudadano que ha pedido la prestación: "Estamos atravesando una situación muy difícil y esta ayuda tendría que ser más accesible".
Uno de los grandes problemas que se está encontrando la gente es la lenta respuesta por parte de la Administración para conseguir una cita previa y así poder acudir a la tramitación de la ayuda. "He venido ya tres veces, la primera vez me dieron hora rápido, pero la segunda estuve mes y medio esperando para que me dieran turno", explicó Ana García, solicitante de la prestación. De hecho, otra ciudadana, Natalia Molina, explicó que le respondieron la semana pasada . "Lo hice a través de la firma digital para que fuera más rápido, pero me contestaron hace nada. La presenté el primer día a primera hora y me han contestado hace una semana". Asimismo, sindicatos como UGT alertaron de que se están dando citas para solicitar esta prestación fuera del plazo existente, que finaliza el próximo 15 de septiembre.
Muchas condiciones
Por otro lado, el amplio conjunto de requisitos necesarios para que esta ayuda se pueda aceptar está haciendo que muchos se queden fuera del cupo. Así lo expresó Rubén Martínez: "El único problema que tengo para que no me acepten el Ingreso Mínimo Vital es en el tema de la vivienda. No está muy claro la cuestión de la convivencia para pedir la ayuda". Los ciudadanos se quejaron de que no se haya explicado de forma clara cuáles son los requisitos necesarios y que estos sean demasiado elevados para tratarse de una ayuda a los más vulnerables. "Siempre me falta algo. Ahora no me había apuntado como demandante de empleo, es fallo mío", declaró Ana.
Otra de las condiciones que está provocando incertidumbre es el certificado de empadronamiento. Los ciudadanos piensan que con el que se utiliza para viajar es suficiente, cuando realmente se requiere el certificado de empadronamiento que garantice dos años de residencia en España.
Caos en la Seguridad Social
Fuentes cercanas a la Administración informaron de que falta mucho personal y las oficinas están bajo mínimos. Por ello están tardando tanto en responder a las demandas. Además, estas mismas fuentes señalaron que con esta nueva ayuda los funcionarios se ven obligados a dejar de atender otras demandas relacionadas con la maternidad o la jubilación. Así, señalaron que el principal problema es que hay pocos ciudadanos que cumplan con todos los requisitos exigidos por parte de las instituciones, por lo que la mayoría de demandas no salen adelante o están pendientes de alguna condición.
Por último, sostuvieron que todas las solicitudes se llevan a cabo de forma telemática, de manera que las personas más mayores tienen dificultades para acceder a este tipo de herramientas y entender bien los procesos. De esta manera, indicaron que la idea del Ingreso Mínimo Vital es muy buena y está bien planteada por parte del Ejecutivo, pero para que se pueda cumplir es necesario dotar a las Administraciones de herramientas y empleados que sean capaces de atender todas las demandas de los ciudadanos en las islas.
