A las 10:28 de la mañana del pasado lunes 24 de agosto, cerca de Palmanyola, un hombre caminaba solo y, aparentemente borracho. Este, de 29 años, deambulaba por la entrada de Son Térmens cuando fue localizado por dos agentes de la Policía Local de Bunyola, alertada por alguien que le había visto. Cuál fue su sorpresa cuando les confesó que era positivo de covid-19. Los policías, sorprendidos por la declaración y tomando las medidas de seguridad pertinentes, comenzaron interrogarle.

El hombre, que reside en Esporles, les explicó que, al parecer, se había contagiado de coronavirus . Después de haberse peleado con su padre, decidió irse a virir a casa de su tío. El hombre, que mostraba somnolencia y confusión, afirmó que se había tomado una caja de Lorazepam y tres pastillas de Tranxilium.

Los policías, ante el peligro de que una persona contagiada estuviera deambulando por la calle sin estar cumpliendo el aislamiento, decidieron contactar al centro de emergencias 112. Estos les proporcinaron los pasos a seguir sobre la actuación con una persona asintomática sin hogar. Asimismo, Salud Pública confirmó el caso positivo, así que se determinó su traslado por una ambulancia especializada.

En el tiempo de espera, el individuo siguió conversando con los agentes y les contó que su familia había estado conviviendo con él en Esporles durante los últimos días sin tomar ningún tipo de precaución para evitar el contagio, aún conociendo su situación médica. Además, la familia seguía frecuentando un bar de Pamanyola aún conociendo el positivo. Informó también que los integrantes de la familia no habían podido mantener la distancia de seguridad ya que estaban residiendo en una caseta de campo de Esporles, sin agua ni luz.

El contagiado acabó siendo trasladado por el 061 al Meliá MeliáPalma