El Govern no solicitará, al menos de momento, la declaración del estado de alarma en Balears. El ejecutivo desecha por ahora la oferta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a las comunidades de recuperar el marco jurídico activado durante la primavera para la toma de medidas excepcionales, como las limitaciones a la movilidad o el confinamiento. El ejecutivo autonómico entiende que ahora mismo cuenta "con las herramientas necesarias" para la aplicación de posibles nuevas medidas para el control de la segunda ola del coronavirus en Balears.

"La comunidad cuenta con las herramientas necesarias para aplicar las medidas que se van decidiendo a través de las diferentes resoluciones firmadas por la consellera de Salud", fue la respuesta que dio la portavoz del ejecutivo, Pilar Costa, tras la comparecencia del presidente del Gobierno. De esta manera, el ejecutivo no se plantea tener que recurrir a esta fórmula, sin descartarla tampoco para un futuro si hubiera que tomar medidas que requirieran del paraguas del estado de alarma.

Hasta la fecha, a diferencia de otras comunidades, donde jueces han tumbado alguna de las medidas, todas las restricciones puestas en marcha desde el Govern, desde la prohibición del ocio nocturno, la obligatoriedad de las mascarillas o el veto a fumar en calles y terrazas si no se cumplen las distancias de seguridad, han contado con el aval de los tribunales. En esta línea, Costa apuntaba ayer que "se trata de unas medidas excepcionales que los tribunales han ratificado y que han implicado importantes restricciones en los ámbitos donde actualmente se están dando la mayoría de contagios: el ocio nocturno y las reuniones familiares".

El pasado lunes, el portavoz del comité autonómico de gestión del coronavirus en las islas, el doctor Javier Arranz, al mismo tiempo que reconocía que el archipiélago ya vive una "segunda ola" evitó descartar nuevas restricciones, pero ya avisó que se esperaría a ver el resultado de las últimas.

No recurrirá al ejército

Más allá de la aplicación móvil para el rastreo de contacto de positivos de coronavirus -Radar Covid-, el Govern también rechaza la otra oferta de Sánchez y no recurrirá a los 2.000 efectivos del ejército que el presidente ofreció a las comunidades para reforzar los equipos de rastreadores. El Govern, que a día de hoy cuenta con 190 profesionales trabajando en el control y detección de los casos, apuesta por seguir formando sus propios rastreadores y, en breve, incorporará 30 enfermeras, ahora en formación, que elevarán a 220 los rastreadores en las islas.