Las reservas hídricas de Baleares se han situado en el 67 por ciento, dieciseis puntos más que lo registrado el mismo mes del año pasado, cuando se situaban en el 51 por ciento, y a pesar de haber sido un mes de julio más seco de lo habitual. Un dato que coincide con la baja ocupación turística en el archipiélago a raíz de la crisis por el coronavirus.

Según informó ayer la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio en una nota de prensa, las reservas hídricas de Balears se han situado en el 67 por ciento en el mes de julio, cinco puntos por debajo del mes anterior, pero la situación es mejor que el año pasado, cuando se situaban en el 51 por ciento. De hecho, nunca las reservas hídricas de las islas habían registrado un porcentaje tan elevado en un mes de julio en los últimos diez años. Hasta veinte puntos por encima de las reservas registradas en los veranos de mayor sequía en el archipiélago.

Y todo ello a pesar de que éste está siendo por ahora un verano más seco de lo normal. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en el mes de julio, de media, no se acumularon ni tres litros por metro cuadrado (l/m2), lo cual supuso un 45 por ciento de la precipitación habitual en este mes.

Un dato que coincide con la baja presión turística de este año debido a la crisis del coronavirus, con cifras de ocupación en el mes de julio por debajo del 40 por ciento, según el propio sector, lo que podría explicar la mejor situación de las reservas hídricas.

Sólo una unidad en prealerta

Con todo, en este mes de julio, según informó ayer la Conselleria de Medio Ambiente, ha habido un descenso seis puntos en Mallorca hasta situarse en el 68 por ciento. Medio Ambiente apunta que las variaciones del índice de sequía son significativas, dado que son superiores al 5 por ciento en las Unidades de Demanda (UD) de Artà, Tramuntana Sur y Tramuntana Norte, encontrándose ya esta última en situación de prealerta.

Por tanto, el escenario del pasado julio no varía respecto del mes anterior porque todas las unidades de demanda restante están enmarcadas en un escenario de normalidad. Asimismo, ha recordado, para registrarse un cambio de escenario, tienen que pasar tres meses, por lo que, laUD de Tramuntana Norte podrían entrar en prealerta en septiembre si sigue como hasta ahora.

Según Medio Ambiente el descenso es normal en esta época del año y por eso ha concluido, los acuíferos están en buena situación.