El Govern finalmente ha decidido el cese de Joan Gual de Torrella, imputado por presunta corrupción, como presidente de la Autoridad Portuaria, según decidió ayer tras una semana en la que las presiones de Podemos y Més, en especial de los morados, a la presidenta y líder socialista Francina Armengol han acabado con la destitución. Esta aún tardará una semana en formalizarse, ya que ayer la jefa del Ejecutivo balear se encontraba en La Rioja en la Conferencia de Presidentes con Pedro Sánchez y la decisión la adoptará el próximo viernes el Consell de Govern de manera colegiada. Sin embargo, en el que se celebró ayer el Ejecutivo ya tomó el acuerdo, según anunció su portavoz, la socialista Pilar Costa.

La decisión se produjo después de que Gual de Torrella informara por escrito al consejo de administración de la Autoridad Portuaria Balear que había puesto su cargo a disposición de Armengol, según explicó el vicepresidente del Govern, Juan Pedro Yllanes (Podemos). Fue Yllanes el que ayer puso sobre la mesa del Consell de Govern la necesidad de un acuerdo ya. "Probablemente esta decisión se debería haber tomado mucho antes y si hubiera dependido de mí, se hubiera adoptado en otro momento anterior", dejó claro Yllanes, quien consideró que era "absolutamente necesario" tomar esta medida por "limpieza democrática". Añadió que respeta la presunción de inocencia, pero ese aspecto debe tratarse "en los tribunales, en la parte judicial", mientras que "en la parte política" había que adoptar esta decisión.

Si el viernes de la pasada semana, con Gual de Torrella detenido, Costa se escudaba en la falta de información más allá de la publicada en los medios para poder acordar medidas, ayer sostuvo que el Govern no disponía de más datos, recordando que el caso está "bajo secreto de sumario". Sin embargo, declaró que "hay una vertiente de responsabilidad más política del nombramiento, que fue por el Consell de Govern", por lo que su destitución también debe acordarse en este organismo y trasladarla al ministerio de Fomento para que sea efectiva.

Respecto a las presiones de Podemos y Més, Costa no quiso pronunciarse alegando que las discusiones "del Consell de Govern se quedan en el Consell de Govern", y que ella se limita a explicar el "acuerdo político" adoptado en el Ejecutivo balear. Sin embargo, las declaraciones posteriores de Yllanes dejaban claras las discrepancias que se han producido entre los socios del Pacto, con Armengol y el PSIB reticentes a adoptar una decisión mientras Més, y sobre todo Podemos, empujaban para que se acordara la destitución de Gual de Torrella.

Desde que el jueves de la pasada semana por la noche Gual de Torrella fuera detenido, junto con otros cuatro directivos de la Autoridad Portuaria, quedando horas después en libertad con cargos, se esperaba una decisión por parte del Govern, que optaba por el silencio. El pasado miércoles, Gual de Torrella defendió su inocencia ante el consejo de administración de la Autoridad Portuaria, donde dejó claro que no tenía intención de dimitir. Desde ese día, las presiones se incrementaron, en especial por parte de Podemos.Tras las presiones

Si ayer Yllanes se expresó con claridad, más aún lo hizo poco después el portavoz de Podemos en el Parlament, Alejandro López, quien sostuvo que "la presencia de Podemos en el Govern hace que se tenga contundencia" ante este caso. "La exigencia desde un principio que hemos tenido sobre el cese, por fin se ven sus resultados y además demuestra la utilidad de Podemos en un gobierno, que es cómo se puede influir de forma real en las acciones", dijo.

De hecho, Podemos y Més no quisieron garantizar al PSIB que rechazarían la petición del PP de que Armengol compareciera en el Parlament para dar explicaciones por este caso, lo que provocó que la Junta de Portavoces que debía celebrarse el pasado miércoles se aplazara a ayer, a instancias del presidente del Parlament, el socialista Vicenç Tomàs. Ayer, una vez conocida la decisión del Govern, los socios del Pacto rechazaron la petición del PP.

"La única responsabilidad del Govern es sobre el nombramiento y sobre el cese, y el cese ya se ha comunicado que va a ocurrir, con lo cual hacer comparecer a la presidenta para que informe de algo que está bajo secreto de sumario y que no tiene información, nos parece atemporal y solo quiere servir para desgastar al Govern por oportunismo político del PP", dijo Alejandro López. Miquel Ensenyat, portavoz de Més en el Parlament, quien afirmó que "es público que había cierta controversia" en los partidos del Pacto respecto a la destitución de Gual de Torrella y "es un tema que ha preocupado y ocupado a los partidos que dan apoyo al Govern", se expresó en el mismo sentido que López sobre la petición del PP de comparecencia de Armengol.

PP: "El cese de Gual no exime a Armengol de dar explicaciones"

El portavoz adjunto del grupo parlamentario popular, Toni Costa, afirmó ayer que la decisión del Govern de destituir a Joan Gual de Torrella como presidente de la Autoridad Portuaria "no exime a Armengol de dar explicaciones sobre el caso". Costa efectuó estas declaraciones después de que ayer la Junta de Portavoces del Parlament rechazara la solicitud del PP de que la presidenta del Govern compareciera en el Parlament por este asunto.

La Junta de Portavoces debía haberse reunido el pasado miércoles para decidir sobre la comparecencia, pero Podemos y Més no garantizaron al PSIB su voto en contra por lo que se aplazó a ayer, cuando la solicitud del PP fue rechazada por los partidos del Pacto. Para Toni Costa, esto significa que "Podemos y Més han elegido convertirse en cómplices del PSIB y de la presidenta del Govern, evitando con su voto que ésta dé explicaciones en la Cámara". Añadió que "se ha evidenciado el pacto al que han llegado PSIB, Més y Podemos para salvar a la presidenta Armengol de dar la cara" por este asunto. "Lo que ha ocurrido no debería pasar en una democracia, porque nunca se debería votar en contra de ser transparente", declaró el diputado popular.