El Govern no descarta aumentar las restricciones en bares y restaurantes, como se han hecho en otras comunidades autónomas, para evitar que se propaguen los contagios de coronavirus.

Maria Antònia Font, directora de salud pública de la conselleria de Sanitat, ha confirmado esta mañana que las autoridades sanitarias están muy pendientes del desarrollo de los contagios que se están produciendo en otras comunidades autónomas, para evitar que estas situaciones lleguen a Baleares. Y si para conseguir este objetivo se necesitan aumentar las restricciones, se tomarán las medidas sanitarias necesarias, si bien en estos momentos está descartado un confinamiento, como se produjo en los momentos de mayor intensidad de la pandemia.

Font detalló que en estos momentos se controlan en Baleares 25 brotes y se mantiene en vigilancia a unas 600 personas, que están pendientes del resultado de las pruebas PDR.

Uno de los casos más significativos es el contagio que se produjo en un hotel de Portopetro. La directora de salud pública confirmó que el origen del contagio fue un albañil que trabaja en unas obras en el hotel, que empezó a notar síntomas leves. Al realizarse la prueba se confirmó el contagio y después se realizaron las pruebas a otros compañeros, dando positivos, aunque sin ningún tipo de síntomas, otros ocho trabajadores.

Todas estas personas están aisladas en un edificio aislado del hotel que, en principio, no se va a cerrar, debido a que estos trabajares no han tenido contacto con los turistas. Salut realizará pruebas al centenar de empleados que trabajan en el hotel.

Con respecto a los diez turistas que están asilados en el hotel de Peguera contratado por el Govern, Font detalló que el origen del contagio se produjo en Madrid. Se trata de un grupo de turistas nacionales que viajaron a Madrid para pasar unos días de vacaciones con unos amigos. Uno de ellos se enteró que había estado en contacto en Madrid con personas que se habían contagiado. Pese a que no mostraba síntomas del desarrollo de la enfermedad comunicó la información a las autoridades sanitarias, que optaron por realizarle el test. La prueba fue positiva y se le aisló a él y a sus nueve amigos, entre otras cosas porque ya tenían que abandonar la casa que habían alquilado. Todos estos turistas están asintomáticos. Sobre el que dio positivo se está averiguando si está en contagio activo o se encuentra en su última fase.

Antònia Font confirmó que el 65% de los contagios que se han detectado se han producido en reuniones familiares, debido a que se relajan las medidas sanitarias y que por esta razón se ha reducido el número de personas autorizadas para realizar estos encuentros.

También confirmó que la mayoría de los brotes que se están detectando son de jóvenes que han estado en botellones. Por fortuna, la mayoría de síntomas son muy leves o incluso asintomáticos, si bien advirtió que el virus se comporta de una forma muy extraña y puede producir consecuencias graves.

La directora de salud publica también confirmó que se ha detectado un caso positivo en una residencia de ancianos, que ha sido trasladada a un hospital para evitar que contagie al resto de residentes.