El obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, presentó ayer a su nuevo consejo asesor, que está formado por seis personas laicas expertas en varios ámbitos. La mitad son mujeres y todos ellos le ayudarán a "acercar la Iglesia a la realidad viva de la sociedad", en palabras del máximo prelado, que con esta iniciativa "pionera" en todo el país finaliza los cambios en la Diócesis isleña. A pocos meses de cumplir su tercer aniversario tras sustituir a Javier Salinas, Taltavull renueva además el consejo episcopal, que se reduce de ocho a cinco vicarios para crear un equipo a medida y mantener a los sacerdotes de su máxima confianza, tal como ya informó este diario.

Respecto a las nuevas caras del ámbito civil, también se trata de personas de su entera sintonía y que "han trabajado previamente en el organigrama de la Iglesia", entre ellas la directora de Càritas, Margalida Riutort. Le acompañan la nueva secretaria general del Obispado, Xisca Ferrer, la primera mujer en este cargo; Maria Dolors García-Carpintero, procedente de la Institución Teresiana y que se encargará del área de Educación y Formación; Miquel Noguera para los asuntos económicos y que proviene de la gestión de una empresa turística con un millar de empleados; Jaume Martorell, en el área para el Anuncio, la Celebración y los Movimientos; y el diácono Joan Carles Thomàs, en representación de los 16 que hay en Mallorca.

El acercamiento de la Iglesia a la sociedad "es muy importante para conocerla y cooperar", de ahí la idea de incorporar laicos en el órgano de gobierno. Se reunirán cada dos semanas con el obispo y los cinco vicarios que forman el consejo episcopal, que a su vez mantiene encuentros semanales. Según Taltavull, "la propuesta del consejo asesor fue consultada con los vicarios, que dieron su aprobación", afirmó en referencia a las voces en contra dentro del clero sobre esta innovación.

"No he inventado nada nuevo", destacó, ya que está contemplado "en el Derecho de la Iglesia, así como en la necesidad pastoral", y va en la línea de lo que postula el Papa Francisco. Por ello, animó a las parroquias a hacer lo mismo, "que todas tengan un consejo pastoral de un grupo de laicos que les ayuden", debido a que a veces los párrocos "se ven solos". "Es muy importante que contemos con todo el pueblo de Dios", dijo sobre el laicismo como "elemento de transformación" en la Iglesia de Mallorca.

Respecto al consejo episcopal, el obispo aseguró que los cambios se producen por edad de algunos de ellos o por el nuevo destino de otros y negó tajantemente que se haya "defenestrado" a nadie en la reestructuración. Se marchan los vicarios Eugeni Rodríguez, Nadal Bernat, Jaume Estela y Miquel Gual; se incorpora el párroco de Manacor, Antoni Amorós, que será el vicario de las zonas de Lluc-Raiguer, Nord, Llevant, Migjorn y Pla; y continúan el nuevo vicario general, Josep Adrover, que ya juró su cargo en la Seu, y Marià Gastalver, Antoni Cañellas y Francesc Vicens. El acto oficial de juramento o promesa se hará el viernes en el Palau Episcopal.