El secretario general del PP balear, Antoni Fuster, afirmó ayer que el partido "aún no pedirá formalmente" la destitución de Joan Gual de Torrella "a la espera de ver de qué se le acusa", a pesar de su imputación. "Defendemos la presunción de inocencia", dijo Fuster quien, no obstante, consideró que "sería bueno" que la presidenta del Govern y líder del PSIB, Francina Armengol, "le pidiera la dimisión o planteara su destitución".

Fuster afirmó que "dentro del respeto del PP a las actuaciones judiciales", los populares están "a la espera de "cómo se desarrollan", si bien consideró que "este presunto caso de corrupción afecta al Govern de Armengol, que tendrá que dar explicaciones", así como "la delegada del Gobierno, Aina Calvo", ya que el nombramiento del presidente de la Autoridad Portuaria es del ministerio de Fomento, aunque a propuesta del Govern.

"Estamos ante un caso de presunta corrupción que afecta al PSIB", insistió Fuster, quien dejó claro que los populares consideran que "Armengol y Calvo estarán obligadas a dar explicaciones".

Junto a ello, el secretario general del partido aprovechó para resaltar "el buen trato a los presuntos corruptos en este caso por parte de la Justicia, sin paseíllos ante los medios de comunicación ni ser expuestos, como ha ocurrido con cargos del PP" en los casos que han afectado a los populares.

Desde los partidos de la oposición en Balears no ha habido prácticamente reacciones tras las detenciones de la cúpula de la Autoridad Portuaria, salvo estas declaraciones de Fuster y el registro por parte de Vox en el Congreso de los Diputados, el mismo viernes, de una petición de comparecencia en la Cámara Baja del ministro de Transportes, José Luis Ábalos, para que explique los motivos de la detención de Joan Gual de Torrella, en el marco de la operación anticorrupción.