María Salom, senadora por el PP balear, acusó ayer al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, de violencia de género y de ser un "recalcitrante machista" por haber guardado durante un tiempo la tarjeta que le hicieron llegar del móvil que le habían robado a su ex colaboradora Dina Bousselham, antes de devolvérsela. Por esta actitud, y por sus "mentiras", la senadora popular pidió su dimisión.

"Ni a mí, ni a la señora Dina ni a Podemos se nos acusa de ningún delito. Me ha acusado usted aquí de varios delitos. Lo razonable es que vaya usted a un tribunal a ver si esta vez consiguen encontrar algo", replicó Iglesias a Salo durante la sesión de control al Gobierno en el Senado.

El líder de Podemos afirmó que "a pocas formaciones se las ha investigado tanto para encontrar algo turbio" como a la suya y sostuvo que si se hubiese investigado igual al PP, "quizás" muchos de los senadores que presenciaban el pleno "estarían en la cárcel", lo que provocó abucheos desde la bancada popular.

De hecho, Iglesias incidió en que el caso Villarejo, en el que se integra la pieza Dina a la que hizo referencia Salom, en realidad investiga "delitos graves que tienen que ver básicamente con la construcción de una trama parapolicial" con la que el Gobierno del PP trató de "espiar" a partidos de la oposición, incluido a Podemos, y "tapar" su corrupción. "Yo creo en la justicia, y aunque ustedes van a mover Roma con Santiago para que se vayan de rositas, estoy convencido de que en España no habrá impunidad para los delincuentes", apostilló el vicepresidente segundo.

Salom realizó una dura intervención contra Iglesias en la que, además de pedirle su dimisión, le acusó de incumplir los objetivos de la Agenda 2030 que él mismo gestiona con sus actitudes "machistas" y "paternalistas" de "macho alfa" con su ex colaboradora, al haber decidido por ella cuando no le entregó de inmediato la tarjeta que le llegó con el contenido de su móvil robado meses antes.

El líder de Podemos explicó hace días que esta decisión de guardar la tarjeta la tomó porque no quería someter a Bousselahm a más presión. Sin embargo, Salom sostuvo que el verdadero motivo fue, a su juicio, protegerse él mismo del contenido que pudiera haber en esa tarjeta. "Se queda la tarjeta, accede a su contenido, violando su intimidad, y luego se la devuelve, pero después de meses, e inservible", añadió la senadora.

"Usted, hombre, decide por ella, mujer, en clara muestra de su actitud machista, que probablemente también sea constitutiva de un delito. ¿Qué información sobre usted contenía esa tarjeta, que le llevó a actuar de una forma tan desleal con su colaboradora? Nadie en su sano juicio entiende que usted se deshiciera del contenido para protegerla a ella", le espetó. Añadió que en realidad Iglesias se estaba protegiendo a sí mismo. "¿De qué?", preguntó antes de asegurar que "todo eso representa violencia de género y machismo puro y duro". "Quién lo iba a decir, el señor Iglesias convertido en un recalcitrante machista", apostilló.