"No nos merecemos ni esos turistas ni esos empresarios" o "no los queremos, que no vengan" fueron algunas de las frases pronunciadas ayer por el conseller de Turismo, Iago Negueruela, en relación a los visitantes que llegan a las islas para practicar excesos en el consumo de alcohol y que no respetan las medidas de seguridad sanitaria, y a aquellos que promueven este tipo de actividades para lucrarse.

Negueruela y la consellera de Administraciones Públicas, Isabel Castro, comparecieron ayer públicamente no solo para anunciar las medidas con las que se quiere endurecer la lucha contra el turismo de excesos, sino para lanzar un claro mensaje a los mercados emisores, destacando que Balears es el destino turístico más seguro del Mediterráneo y que además no se van a tolerar comportamientos que pongan en peligro este hecho.

Esa insistencia demuestra igualmente la preocupación existente en el Govern y en el sector turístico ante la posibilidad de que en algunos países, como Alemania, se opte por aplicar medidas restrictivas a sus ciudadanos que viajen al extranjero, especialmente tras las declaraciones del ministro de Sanidad germano, Jens Spahn, respecto al riesgo que suponen algunos comportamientos en esos destinosriesgo que suponen algunos comportamientos en esos destinos. Esto se refleja también en el apoyo unánime que el Ejecutivo balear está consiguiendo de patronales y sindicatos de las islas en las medidas contra el turismo de excesos, reflejado ayer en la reunión mantenida por Negueruela y Castro con los responsables de las patronales CAEB y PIMEB y de los sindicatos UGT y CCOO.

El primer mensaje reiterado hasta la saciedad por los dos consellers es que los datos de propagación del coronavirus de Balears se encuentran entre los mejores de Europa, lo que convierte a las islas en el destino más seguro del Mediterráneo. En los últimos 14 días la tasa de incidencia acumulada en el archipiélago es de 4,7 casos por cada 100.000 habitantes, por debajo de la alemana (6,8) y de la media española (14,8).

No poner en riesgo el empleo

Pero el segundo mensaje más repetido es que no se van a tolerar comportamientos que pongan en riesgo los 200.000 empleos del sector turístico de las islas, ya que una buena situación sanitaria es la que impulsa una más rápida recuperación económica.

Y ahí se enmarca el listado de frases como las antes señaladas, a las que se suman otras como "no queremos turistas incívicos" o "que no vengan porque lo que ellos quieren ya no se puede hacer en Balears".

Para ello, se están manteniendo reuniones con los turoperadores para evitar la comercialización de ese tipo de productos y se anunció la puesta en marcha de una campaña informativa, junto a las patronales turísticas, en países como Alemania y el Reino Unido respecto a la seguridad sanitaria en el archipiélago y sobre los comportamientos que han quedado vetados en las islas.