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Mercado inmobiliario

La venta de viviendas en los cinco primeros meses del año cae un 22%

El descenso ha sido especialmente intenso en abril y mayo al haber alcanzado el 46%

El descenso en las ventas está siendo más acentuado en las viviendas nuevas. M. Mielniezuk

La crisis generada por el coronavirus crisis generada por el coronavirus está teniendo un impacto muy duro sobre el mercado inmobiliario balear hasta el punto de que durante los cinco primeros meses del año la compraventa de viviendas ha caído en las islas un 21,9%. Este descenso ha sido especialmente intenso durante abril y mayo, meses en los que estaba en vigor el estado de alarma.

Los datos facilitados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) cifran en 4.912 las operaciones de compraventa de viviendas que se han registrado en el archipiélago durante los cinco primeros meses de este año. A lo largo del mismo periodo de 2019 se habían alcanzado las 6.292, con la citada caída del 21,9%.

Lo que también dice el INE es que ese desplome se ha centrado en abril y mayo. En esos dos meses, las residencias adquiridas en Balears se limitaron a 1.371, cuando en las mismas fechas del pasado año alcanzaron las 2.562, lo que supone una reducción del 46,4%.

Hay un dato igualmente significativo, y radica en el alcance que esta crisis está alcanzando dependiendo de que se trate de inmuebles de nueva edificación o usados.

Durante los cinco primeros meses de este año se compraron en las islas 876 viviendas nuevas, un 27,6% menos que en 2019. Pero si se analizan las operaciones correspondientes solo a abril y mayo, la cifra de estas ventas se reduce a 223, con un desplome del 59,8% en relación al ejercicio anterior.

Peso de la segunda mano

En el caso de los inmuebles de segunda mano, entre enero y mayo del presente ejercicio se han adquirido 4.036, un 20,3% menos que en 2019. Si nos limitamos a la cifra de abril y mayo, ésta ha sido de 1.148 viviendas, un 42,8% por debajo del año pasado, lo que refleja que en estos momentos el mercado inmobiliario balear se sustenta en la comercialización de residencias de segunda mano, ante la escasez de los proyectos de nueva edificación, vinculada en muchos casos a la falta de solares a precio asequible que se registra en el archipiélago y muy especialmente en los municipios con mayor demanda, como es el caso de Palma, según se ha venido denunciando de forma reiterada desde la asociación balear de promotores inmobiliarios.

Esta debilidad en las nuevas promociones se está viendo notablemente agravada a causa de la crisis generada por la Covid-19, según reconoce el vicepresidente y portavoz de la citada patronal, Bartolomé Mayol, el cual destaca que la paralización de nuevos proyectos, al menos hasta que se aclare la situación de la pandemia dentro de unos nueve meses, está siendo generalizada.

Mayol subraya que una buena parte de las empresas promotoras está optando por refugiarse en los "cuarteles de invierno", es decir, terminar los proyectos que están en marcha y a partir de ahí optar por congelar la mayor parte de los que aún no se habían iniciado a la espera de que se aclare la situación económica.

Porque uno de los problemas de estas empresas, se señala, es el recorte que están aplicando muchas entidades financieras en la concesión de hipotecas a las familias que se han visto afectadas por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) o cuyo empleo esté muy vinculado a la actividad turística.

Mucha incertidumbre

La presidenta del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Balears, Natalia Bueno, considera que el problema para obtener financiación no es tan grave, y que el principal obstáculo en el mercado de segunda mano es la incertidumbre.

Porque la bajada se sustenta, en su opinión, en que muchas familias residentes han aplazado sus decisiones de compra ante las dudas que se han generado en relación a la economía, a lo que se suma el recorte en la llegada de extranjeros, que en las islas protagonizan una de cada tres adquisiciones.

Fincas rústicas

La adquisición de fincas rústicas en Balears registró una caída del 72,1% durante el pasado mes de mayo, superando de forma notable la que se dio en el caso de las viviendas durante ese mes, de un 59%, según los datos facilitados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En mayo se compraron 101 propiedades de este tipo en las islas, muy por debajo de las 363 del mismo periodo de 2019. Según la información del INE, la reducción de estas operaciones respecto al ejercicio anterior se ha mantenido a lo largo de todo 2020, pero se ha acentuado especialmente durante marzo, abril y mayo.

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