El conseller de Educación, Martí March, no logró ayer el respaldo sindical a su propuesta de instrucciones para el inicio del próximo curso, que recibió el voto negativo de todos los sindicatos salvo de CCOO en la Mesa Sectorial a pesar de la promesa de March de que aumentará el número de profesores y se destinarán las inversiones necesarias para afrontar el curso con seguridad ante la pandemia. El conseller se comprometió a convocar una nueva mesa a lo largo de julio para concretar el número de nuevos docentes para el curso 2020/21, sin convencer a la mayoría de los sindicatos.

"No nos fiamos, por lo que a la espera de esa concreción mantenemos el voto negativo", resumió Tino Davia, de UGT. El Stei sostuvo que los centros se ven obligados a preparar el inicio de curso sin saber con cuántos docentes pueden contar y que por ahora el documento presentado por la Conselleria "prevé, en la práctica, recortes de plantilla". En el mismo sentido se expresó ANPE, que sostuvo que el borrador de Educación conlleva "recortes implícitos", UOB y Alternativa.

Así, aunque en esta ocasión los sindicatos no abandonaron la mesa como hicieron el pasado martes, salvo CCOO, el clima del encuentro no fue exactamente de "tranquilidad y confianza", como sostuvo March al acabar la reunión. "Me he comprometido a que habrá más docentes y también a que habrá los recursos para las otras cuestiones que serán necesarias para el inicio de curso y que lo trataremos en la mesa sectorial", insistió el conseller quien aseguró que descarta recortes y que, al contrario, habrá más docentes y más inversión para atender las necesidades.