La prueba piloto desarrollada durante la semana pasada en Mallorca y Eivissa para iniciar la llegada de visitantes se ha cerrado finalmente con la recepción de unos 2.000 turistas, superando la previsión inicial de unos 1.500. El número de vuelos que han operado durante estos días dentro de este plan se ha elevado a 14, también por encima de la planificación inicial.

Estos datos fueron facilitados ayer por el Govern en el marco de la reunión mantenida por la presidenta Francina Armengol con representantes de operadores alemanes como Der Touristik y Condor, en la que participaron también el presidente de la cadena Iberostar, Miguel Fluxà, y el conseller de Turismo, Iago Negueruela.

Un aspecto subrayado por estos dos últimos es la imagen de "destino seguro" que se ha dado de las islas en los mercados internacionales y el impacto promocional que ello ha tenido.

En este aspecto, Fluxà señaló que en este tipo de situaciones los empresarios no miran el color político de los Gobiernos a la hora de colaborar (aunque recordó que él es de "centro-derecha").