La consellera de Salud, Patricia Gómez, sostuvo ayer en el pleno del Parlament que ni ella ni la Conselleria "ha ordenado nunca la clasificación por colores" a usuarios de las residencias de mayores. "Yo no he ordenado absolutamente nada. La conselleria de Salud, afirmó Gómez quien aseguró que este instrumento no se utiliza "para dar un tipo de atención determinado ni para discriminar".

La consellera contestaba así a la popular Tania Marí. Sin embargo, su afirmación choca con un documento en el que se demuestra que fue la subdirección de atención a la cronicidad del Ibsalut la que contempló esta vía asistencial ante el coronavirus. En el pleno, Gómez insistió en que se trata de un sistema que se conoce "como la pirámide de GMA para grupos de movilidad ajustada y es una herramienta de valoración clínica, que se hace servir en todas las estrategias de cronicidad en todo el Estado y en todo el mundo desde hace mucho tiempo". Además, defendió que "Balears ha sido de las pocas comunidades que ha ingresado a todos los que han necesitado, también a los usuarios de residencias".

Poco después la presidenta del Govern, Francina Armengol, se expresaba en el mismo sentido en respuesta a Patricia Guasp, de Ciudadanas. "No hemos abandonado a nadie, a cada persona se le ha dado el tratamiento que ha necesitado", afirmó Armengol quien acusó a Guasp de " jugar con la vulnerabilidad de la gente mayor" por criticar este cribado de los ancianos por colores en función de su estado de salud "en contra del informe del Comité de Bioética de España sobre la priorización de recursos sanitarios en el contexto de la crisis del coronavirus".