La Conselleria de Salud y Consumo ha notificado este jueves otros cinco casos positivos de coronavirus en las últimas horas, por lo que ascienden a 2.247 los registrados en Baleares desde el inicio de la emergencia sanitaria.

El portavoz del comité autonómico de Gestión de Enfermedades Infecciosas, Javier Arranz, ha destacado en una rueda de prensa telemática que 1.816 personas ya se han curado en las islas y que se contabilizan 204 casos activos y 227 defunciones por coronavirus.

Ha recalcado que no se han detectado nuevos casos positivos en las residencias de personas mayores de la comunidad.

Ha señalado que 121 profesionales sanitarios se encuentran en vigilancia activa, 107 de ellos en Mallorca, y que 54 personas con COVID-19 permanecen hospitalizadas en Mallorca, 12 de ellas en unidades de cuidados intensivos (UCI).

El portavoz también comentado que cada vez se están detectando más casos en las unidades de atención primaria, si bien se tratan de enfermos de coronavirus que presentan una sintomatología leve, por lo que pueden permanecer en sus domicilios y se les hace un seguimiento de la evolución.

Arranz ha incidido en que el seguimiento de contactos de los nuevos positivos es "muy importante" en esta fase de la desescalada. Ha añadido que Salud realiza el seguimiento de unas 730 personas que han tenido contacto estrecho con las personas que han sido diagnosticadas recientemente de coronavirus, y que unos 60 de estos contactos han mostrado síntomas compatibles con la enfermedad.

En esta última semana, dos contactos estrechos de casos positivos han arrojado un caso positivo en la prueba de diagnóstico, test que se ha realizado ya que tenían síntomas, ha dicho Arranz.

Por su parte, la consellera de Salud, Patricia Gómez, ha asegurado que en los últimos siete días se ha producido un repunte de casos positivos porque se realizan más pruebas de detección del virus, pero ha incidido en que no son rebrotes.

Gómez ha subrayado que se están ultimando los protocolos de actuación ante la llegada de turistas alemanes a través de aeropuertos y puertos de las islas ya que "una parte de competencia es de Aena, otra de Sanidad y otra de Salud", si bien ha reconocido que "se debe mantener el cuestionario de declaración responsable del estado de salud".

Además, la consellera ha defendido que en el sistema sanitario internacional se usan diferentes herramientas para determinar la situación clínica de un paciente y que la utilización de colores que se han usado en las residencias para determinar la gravedad de los casos positivos en residencias de ancianos "son criterios siempre técnicos".