La dirección general de Pesca y Medio Marino, de la consellería de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha denunciado un palangrero de superficie que pescaba en aguas interiores de las Balears, en una zona entre el Parque Nacional de Cabrera y la Colònia de Sant Jordi.

La pesca con palangre está prohibida en aguas interiores y la embarcación podría ser sancionada con hasta 60.000 euros, explicó ayer la conselleria en un comunicado en el que detalló que los hechos ocurrieron el pasado 30 de mayo.

Desde el 5 de mayo, y según los datos del Centro de Seguimiento de Pesca facilitados por los inspectores del ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, se tenían sospechas de que una embarcación del censo de palangre en superficie pescaba en aguas interiores de las Balears.

Semanas más tarde, se volvió a detectar la misma embarcación en aguas de las islas y el pasado 30 de mayo, volvía a ser detectada en aguas interiores, cerca del Parque Nacional de Cabrera

La colaboración entre los inspectores de pesca de la Consellería y los del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha sido clave para interceptar esta embarcación.

Una vez allí, se informó al patrón de que no podía pescar en aquella zona y se supervisó la retirada del palangre. El inspector se mantuvo a bordo de la embarcación hasta que ésta abandonó las aguas interiores y redactó el acta de la denuncia.

La Dirección General de Pesca y Medio Marino es la encargada de tramitar esta denuncia. Según la Ley 6/2013, de 7 de noviembre de pesca marítima, marisqueo y acuicultura en Balears, pescar con palangre en aguas interiores se considera una infracción grave y se puede sancionar con hasta 60.000 euros.