Con el avance en la desescalada el plan piloto del Govern y el sector turístico, en el que se trabaja desde abril, corre el peligro de quedarse a verlas venir; el Ejecutivo de Pedro Sánchez no acaba de darle el visto bueno. La presidenta, Francina Armengol, está intensificando la presión para que el ministerio de Sanidad dé el visto bueno y los primeros turistas alemanes puedan llegar a Mallorca a mediados de junio, antes de que finalice el estado de alarma, el día 21 y con el archipiélago en fase 3, si se confirma su pase el próximo lunes.

Desde Madrid van llegando noticias alentadoras para que la temporada pueda arrancar en julio. Ayer el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, confirmó el anuncio de Armengol, respecto a que la cuarentena impuesta a los turistas procedentes del extranjero se levantará el 21 de junio, con el fin del estado de alarma adelantándose a la fecha del 1 de julio prevista en un principio, recogió Europa Press.

Mientras tanto, el sector turístico, que ha trabajado codo con codo con el Ejecutivo balear para echar a andar el corredor turístico con Alemania, no esconde el malestar que produce la falta de concreción de Madrid. Sigue sin definirse si las empresas que opten por reiniciar de forma paulatina su actividad no serán penalizadas al sacar de los ERTE solo a los trabajadores que vayan a necesitar. Como se ha criticado desde la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) y la Agrupación de Cadenas Hoteleras (ACH) ahora mismo se vive una "situación perversa, ya que "en lugar de incentivar la contratación se da el efecto contrario".

Pasajeros en cuarentena

Tras el anuncio de Pedro Sánchez, el domingo pasado, sobre que se prevé que termine el estado de alarma el 21 de junio, Armengol, anunció ayer que "si se hace la prueba piloto, se tendrá que avanzar", debido a que "el 21 de junio también concluirá la cuarentena de viajes internacionales", informó Raquel Galán. Los turistas que nos visiten tendrán "las mismas obligaciones que los residentes", como utilizar mascarillas, advirtió Armengol. El Govern trabaja en una campaña informativa.

Al respecto, hay que resaltar que 103 pasajeros de cuatro vuelos internacionales que llegaron a Son Sant Joan el domingotendrán que pasar el periodo de cuarentena de 14 días, según la Delegación del Gobierno. El aeropuerto registró la llegada de 554 pasajeros y la salida de 606 en 22 vuelos, de los que 14 fueron nacionales.

Está por ver en qué condiciones autoriza el Gobierno central el plan piloto presentado por el Consolat de Mar, si el ministro Salvador Illa da el visto bueno a la llegada a Balears de alrededor de 5.000 turistas desde Alemania (unos 4.000 a Mallorca) o rebaja la cifra. También si se atiende la petición de que sigan activos los ERTE permitiéndose recuperar solo a parte de las plantillas. El Govern opta por "la prudencia y cautela" mientras no haya respuesta de Madrid, que urge para esta semana.

"Si el miércoles (mañana) no tenemos respuesta, no podemos hacer nada", se lamenta Gabriel Llobera. El presidente de la ACH teme que no dé tiempo a alistar los hoteles y sus plantillas, como el de Alcúdia de su cadena, Gardens, que participa en la prueba. Todo sigue en el aire, la venida de los aviones o la venta de los paquetes turísticos, mientras los destinos competidores están tomando la delantera a los españoles. "Se está alargando demasiado" la decisión de Madrid, critica Llobera, para poner en marcha después los corredores seguros.

Desde RIU, que participa en la prueba, se declina anunciar qué hoteles abrirán para los primeros turistas, hasta que no se concreten fechas y se apruebe el plan.