La Plataforma contra los megacruceros instó este lunes al presidente del Parlament Vicenç Thomas, a adoptar medidas ante la "inminente" llegada de cruceros en el Puerto de Palma -prevista después del final de estado de alarma por el coronavirus- por considerar que son un "peligro potencial".

En la misiva enviada este lunes al presidente de la Cámara balear, la plataforma, de la que forman parte una treintena de entidades sociales, ciudadanas y ecologistas, apuntó que "la activación de esta modalidad de turismo debería venir establecida a iniciativa de las instituciones baleares y no por decisión unívoca de la Autoridad Portuaria y las empresas multinacionales de cruceros".

Según la plataforma, su preocupación se basa en las características de esta modalidad turística, "que hacen que un posible positivo por coronavirus sea difícilmente trazable y aislable, por lo que supone un peligro potencial para las ciudades donde hace escala, así como una falta de seguridad para el mismo pasaje y tripulación, que se puede encontrar con la coyuntura de verse obligado a permanecer confinado en el buque".

"Nuestra preocupación se incrementa al ver las presiones existentes que se están haciendo para acelerar la recuperación económica con la motivación de generar puestos de trabajo, obviando los riesgos de los rebrotes del coronavirus, así como los impactos ambientales y sociales que motivaron la petición de la moratoria y el posicionamiento de nuestra plataforma antes de la pandemia", apuntó la plataforma en su carta.

También esta plataforma solicitó una reunión con los portavoces de los grupos parlamentarios, con el objetivo de que el Parlament, "de forma unánime", pida a la Autoridad Portuaria que haga públicas las medidas sanitarias que tomarán, el Plan de Contingencia que aplicarán en caso de que se declare alguna persona -turista o tripulación- infectada por Covid-9 y que se establezca una capacidad de carga de los megacruceros en la ciudad de Palma, ahora más que nunca ante los peligros que genera la masificación.