Los destinos turísticos nacionales e internacionales se encuentran en una situación que recuerda a una novela de Miguel Delibes, El disputado voto del señor Cayo. El libro, ambientado en las primeras elecciones democráticas de 1977, cuenta cómo diferentes fuerzas políticas hacen campaña en un pueblo con apenas tres habitantes. Uno de ellos, el alcalde, el señor Cayo.

Salvando las distancias con la ficción, algo parecido pasa con los destinos turísticos competidores con Mallorca; destinos que ya empiezan a pugnar por el disputado turista, que no puede decirse que vaya a abundar en un verano condicionado por los efectos del coronavirus sobre el mundo de los viajes.

En la carrera por posicionarse en un mercado que se regirá por nuevas coordenadas de seguridad sanitaria, precios y menos caladeros de turistas, administraciones y empresas de lugares vacacionales ya han anunciado medidas para seducir a los visitantes y para no quedarse atrás en las pugnas con otras zonas.

'2x1' en noches de hotel, corredores aéreos entre regiones 'seguras', tests rápidos y gratuitos a la llegada al aeropuerto, acompañantes que te guían hacia el lugar menos concurrido de la playa, sombrillas y hamacas gratuitas... La variedad de opciones es amplia y evidencia que habrá una lucha más encarnizada de lo habitual.

Noches de hotel gratis

En Italia, por ejemplo, Sicilia anunció a principios de mayo que regalaría una noche de hotel a aquellos viajeros que reserven tres pernoctaciones, a través de un sistema de talones que se podrá contratar en la web de Turismo de la isla y que cuenta con un presupuesto de unos 50 millones de euros.

Con este fondo económico, se plantea también la posibilidad de bonificar billetes de avión de los turistas. En la tensa carrera por el disputado veraneante de 2020, son una constante las apelaciones de los gobernantes a una política de brazos abiertos al turismo. Como ha hecho el Gobierno búlgaro, que, siguiendo la tónica general, ha expresado su confianza en que la temporada empiece "cuanto antes".

Tumbonas y sombrillas

Una de sus propuestas estrella es que las hamacas y sombrillas de las playas serán gratuitas este año. El ahorro, como ha remarcado estos días la prensa británica, puede ser significativo para una semana de vacaciones teniendo en cuenta que el coste diario por alquilar este material asciende a seis euros.

El conocido destino portugués del Algarve ya ha anunciado que esta temporada ofrecerá un servicio más personalizado en las playas. Como si de un acomodador de cine se tratase, un informador acompañará al bañista hacia el punto de la playa que esté menos concurrido para garantizar así la preceptiva distancia social.

"Queremos que sean figuras amistosas capaces de ayudar a los veraneantes en estos tiempos de incertidumbre", asegura un miembro de la administración local del Algarve.

En el podio de competidores de Mallorca, ocupa un papel destacado Turquía, cuyo gobierno ha impulsado un programa de calidad de "turismo saludable" con el que distinguir a los establecimientos que respeten los estándares de higiene y cumplimiento de las normas que marcan los nuevos tiempos.

Madeira está apostando fuerte también para presentarse como destino seguro y "libre de Covid-19". Una de sus principales bazas pasa por ofrecer test gratuitos de coronavirus a todos los turistas que lleguen a partir de julio.

En Grecia, mientras, el Gobierno ha anunciado que se les practicará el análisis todas las personas que entren en el país, a quienes se ofrecerá un alojamiento durante un día hasta que se conozca el análisis.

Mercado nacional

El año pasado, visitaron España 83,7 millones de turistas, de los cuales Balears recibió casi 14 millones. Por tanto, existe una importante cuota de mercado por la que lucharán igualmente los destinos nacionales.

Catalunya ya ha lanzado una campaña para atraer el turismo nacional, previendo que habrá menos visitantes internacionales. Su lema: "¡Catalunya es mejor con vosotros!". Otras comunidades como Andalucía han hecho hincapié en la contratación de 3.000 personas para realizar labores de auxiliares en las playas.

Por su parte, Canarias, igual que ha hecho Balears, ha solicitado que, con el dinero que se ha ahorrado del descuento de residente durante el estado de alarma, se bonifiquen conexiones aéreas con la península para activar el turismo nacional.