Los municipios costeros de Mallorca extremarán la precaución para que, a partir del lunes, no se produzcan aglomeraciones en las playas y que se respete la distancia social de dos metros, aunque, a priori, descartan por lo general establecer algún tipo de delimitación física para separar los espacios entre bañistas.

La entrada en la fase 2, que permite el baño recreativo, añade un nuevo desafío a las localidades del litoral mallorquín, que ayer pusieron en común sus preocupaciones y sugerencias en una reunión convocada por la Federació d'Entitats Locals de Balears (Felib), a la que asistieron también representantes de los diferentes Consells insulares.

Policía Local

"Todos los ayuntamientos pondremos una señalítica común en todas las playas para intentar unificar instrucciones, indicando que estamos aún en estado de alarma, que no debe haber acumulaciones y que hay que guardar distancia. Si hay aglomeraciones, deberíamos actuar con Policía Local u otras fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado", explicó a este diario al término de la reunión el vicepresidente primero de la Felib, Josep Marí, alcalde de Sant Josep (Eivissa).

El Consell de Mallorca se encargará de distribuir entre los municipios estos carteles informativos, con los protocolos de seguridad para hacer frente al Covid-19. Marí remarcó que, en todo caso, en este verano que arranca sin actividad turística no parece que de momento vayan a producirse grandes aglomeraciones.

Este encuentro se produjo antes de que, a nivel estatal, trascendieran los detalles de un borrador de protocolo elaborado por el Instituto para la Calidad Turística Española para prevenir posibles contagios en las playas, una información adelantada por la Cadena Ser. El texto ha sido encargado por la Secretaría de Estado de Turismo y se espera que Sanidad le dé el visto bueno en los próximos días.

Este protocolo inicial recomienda mantener una distancia de dos metros entre bañistas, al tiempo que aconseja definir puntos diferenciados de acceso y de salida a la playa. Sugiere además este documento la posibilidad de delimitar zonas en la arena para permitir la distancia social necesaria.

Problemas de limpieza

En principio, los ayuntamientos costeros de Balears no están por la labor de establecer este tipo de separaciones en los arenales, según informó Marí, quien recordó que estos sistemas de parcelación "no serían convenientes para ejecutar la limpieza diaria de las playas". Una limpieza que, dijo, en estos momentos de crisis sanitaria "es más importante que nunca".

"Yo espero que la gente se comporte correctamente y creo que así lo ha demostrado la ciudadanía en estos días", enfatizó el vicepresidente de la Felib.

Otro de los temas que se abordó durante el encuentro de representantes municipales y de los Consells fue el futuro de los concesionarios de servicios del litoral, como puedan ser chiringuitos y explotaciones de hamacas y sombrillas, que verán reducida sobremanera su temporada.