En cuanto se despertó, empezó a preguntar por los payasos. Louis tenía que estar en ayunas, "con lo que le gusta comer", porque una cita muy importante le esperaba en el hospital de día infantil de Son Espases, una punción lumbar en la fase final de su tratamiento contra la leucemia. Sin embargo, la cita imprescindible para él era con Aspirino y Sion Camilla, por lo que ese fue el principal tema de conversación de sus padres con el objetivo de entretenerle y que no pensase en el desayuno. Habían quedado con los doctores de nariz roja a las 10,30, aunque no como siempre ya es casi íntimo de los artistas de Sonrisa Médica, sino con una videollamada. "Tenían pompas de jabón y han hecho muchas tonterías. Están locos. Son muy divertidos", resume el pequeño de cuatro años.

Las Clownsultas Externas se pusieron a su disposición durante media hora para hacerle olvidar dónde estaba, un sitio que conoce bien desde que tenía dos años y medio. "Si no están los payasos, no quiere venir", cuenta su madre, Sabrina Vitalini, encantada de la alternativa que ha encontrado la entidad sin ánimo de lucro ahora que no pueden visitar el hospital por la pandemia del coronavirus. Desde que empezó esta iniciativa, hace poco más de dos semanas, han conectado en directo con una decena de niños de forma privada y personalizada tras una solicitud previa con un mensaje al teléfono móvil 699 498 834.

A Louis le hicieron pompas de jabón y jugaron con cochecitos, ya que "saben que le gustan, como los globos", y por supuesto, "no le comentaron nada sobre comida", añade Sabrina, que advirtió a los payasos con anterioridad de que su hijo estaba en ayunas. Pedro Vázquez, el padre, tiene clarísimo que la sonrisa y felicidad de este pequeño paciente se debe a ellos, "son parte del tratamiento, así como los médicos y enfermeras, y siempre tienen que estar ahí", tal como remarca.

"Peces fuera del agua"

La asociación está pasando por "la etapa más difícil" de sus 25 años de vida, que celebraron por todo lo alto en noviembre. "Al no estar en el hospital, nos sentimos como pez fuera del agua. Cuando todo el mundo está confinado en casa, nosotros sentimos que nos hemos quedado fuera de ella y solo pensamos en volver", afirma la gerente de Sonrisa Médica, Marta Barrio. A ello se suma la "pérdida de ayudas recibidas, motivada por la incertidumbre de la alarma sanitaria", por lo que buscan "empresas que quieran apadrinar futuras Clownsultas Externas y poder dar continuidad al proyecto".

Enseguida se anima y avisa de que preparan la tercera fase de #SonrisaMédicaClownfinada tras las Cápsulas Clownéticas (llevan 60 vídeos, unas 26.000 visualizaciones y un millar de suscriptores en Youtube) y las visitas virtuales por videollamada. En cuanto les dejen, "la tropa revolucionaria payasa se acercará a los hospitales a enviar mensajes a los pacientes desde el otro lado del cristal. Así les sentirán más cerca desde las salas de espera y las plantas de hospitalización". Marta ya está pensando en una actuación en el patio de luces de Son Espases para los niños ingresados.

Tal vez sea la última que vea Louis, porque solo le queda una punción más dentro de un mes. El duro tratamiento oncológico terminará a finales de año, por lo que los payasos estarán a partir de ahora para él en la tele y el circo, pero no en los hospitales.