Todos los sindicatos que integran la Junta de Personal del Área de Ponent, de la que forma parte el hospital de Son Espases, pidieron la dimisión o el cese "inmediato" de la subdirectora de enfermería de Son Espases, María Teresa Pou.

En una carta dirigida al gerente del hospital, Josep Pomar, denunciaron que la gestión de los EPIS por parte de Pou ha sido "pésima". En concreto, afirmaron que Pou había retirado donaciones que los agentes sociales habían realizado para los trabajadores del Hospital de Son Espases y del Hospital General "para comprobar la ficha técnica."

A este respecto los miembros de la Junta de Personal se preguntaron "¿qué ficha técnica tienen las bolsas de basura, ¿qué normativa cumplen?" para expresar la falta de sentido que, a su juicio, tiene la comprobación alegada por Pou.

Asimismo criticaron que en la última reunión mantenida por el comité de seguridad y Salud y referente al debate sobre las mascarillas FFP3 la subdirectora de enferemería expresó que "les echáramos agua" para comprobar el filtrado".

Los sindicatos CC OO, UGT, CSI-F, SIMEBAL, USAE, SATSE y STEI remitieron esta carta en la que también se recordó que el pasado 20 de marzo se envió un correo electrónico "masivo" en el que se solicitaba al personal que aumentara voluntariamente su jornada laboral por la situación de pandemia. Según explicaron, más de una decena de trabajadores aumentó su jornada para el 1 de abril.

Sin embargo, afirmaron que las modificaciones no han sido autorizadas por la subdirección de enfermería hasta finales de abril, con efecto el 1 de mayo con el "consiguiente perjuicio económico de nuestros trabajadores". Asimismo, los miembros de la Junta de Personal de Ponent recordaron que el año pasado se publicó en redes sociales un modelo de contratación que "vulneraba por completo" el acuerdo de bolsa pactado por los agentes sociales en el seno del Mesa Sectorial de Sanidad.

Nula comunicación

Por otra parte los representantes de los trabajadores, aprovecharon la redacción de esta petición para destacar la falta de diálogo entre la subdirectora de enfermería y los agentes sociales. Subrayaron que la comunicación es "nula" y su actitud "altiva", al tiempo que lamentaron que "no solventa ninguna cuestión o problema" planteados por dichos agentes. "Muchos de ellos ni tan siquiera obtienen respuesta", concluyeron.