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Cada centro de salud de Mallorca recibió unas 30 mascarillas pendientes de análisis

De las 3.500 caretas distribuidas en Atención Primaria, unas 2.000 no se llegaron a entregar y permanecen en un almacén de la gerencia

Una mujer con una mascarillas en el centro de salud de Marratxí al comienzo de esta crisis. pere joan oliver.

De la partida de 80.000 mascarillas del tipo FPP2 compradas por el Govern balear a un proveedor chino con un coste de 192.000 euros y que análisis posteriores demostraron que podrían no filtrar bien las partículas nocivas, finalmente tan solo se distribuyeron unas 1.500 y todas ellas en centros de salud de Mallorca, explicaron ayer fuentes del Servei de Salut.

"De las 3.500 que se iban a distribuir por los centros de salud de la Gerencia de Atención Primaria (GAP) de Mallorca, finalmente solo se mandaron unas 1.500, unas treinta por cada centro de salud de la isla. Las 2.000 restantes quedaron sin distribuir e inmovilizadas en un almacen de la gerencia", señalaron las citadas fuentes.

Previsiblemente hasta finales de esta semana no se sabrá si estos cuestionados elementos de protección frente al coronavirus fueron utilizados por profesionales de este nivel asistencial y si estos sanitarios eran personal de riesgo por haber estado en contacto directo con pacientes contagiados o bajo sospecha de estarlo.

En cualquier caso, desde el IB-Salut señalaron que esta partida de mascarillas, sobre la que recordaron que se han efectuado dos análisis, uno de ellos que certificaría su idoneidad y otro que no, fue una de las primeras que adquirió el Govern en China gracias a la mediación de una abogada de esa nacionalidad que trabaja en un conocido bufete de Palma y que el container llegó a Mallorca el pasado mes de marzo.

A la espera del tercer análisis que determinará si pueden o no ser utilizadas, el IB-Salut añade que el casi un mes transcurrido desde su llegada haría muy improbable que su uso estuviera provocando nuevos contagios entre el ya castigado colectivo sanitario.

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