El Servei de Salut admitió ayer que tiene inmovilizada el 80% de una partida de 80.000 mascarillas del tipo fpp2 (las de mayor protección) presuntamente defectuosas que adquirió el pasado mes de marzo a un proveedor chino. Pero lo más preocupante de esta situación es que el 20% de esta partida de material sanitario, unas 16.000 mascarillas, ya habría sido distribuida por diferentes gerencias asistenciales, según admitieron fuentes del propio Servei de Salut.

Estas mismas fuentes aseguraron que la retención del material sanitario se ha realizado tras obtener un informe negativo sobre su idoneidad por parte de un laboratorio que pondría en cuestión un primer dictamen positivo de otro organismo. Y que en estos momentos se está a la espera del tercer y definitivo examen.

El IB-Salut afirma que pagó un precio de 2,4 euros por cada mascarilla de este tipo, lo que elevaría el desembolso total hasta los 192.000 euros. Sin embargo, antes del control de precios por el Gobierno central, este periódico pudo constatar que en una farmacia de Palma reclamaban hasta 5,5 euros por una mascarilla de este tipo, una de las que proporcionan mayor seguridad frente a virus como el SARS-CoV-2.

Fuentes oficiales informaron de que el proveedor chino de este material bajo sospecha habría asegurado que contaba con todos los permisos preceptivos para exportar estas mascarillas que, subrayó también, cumplirían todos los estándares de filtración exigidos a estos productos sanitarios. De la misma manera, se habría comprometido a reponer sin coste alguno no solo todo el material inmovilizado, sino también el distribuido.

Sobre las gerencias a las que podrían haber llegado estas mascarillas bajo sospecha, el IB-salut aseguró que solo le constaba su distribución en Atención Primaria. Y señaló que su gerente en Mallorca, Miquel Caldentey, ya se habría puesto en contacto con todos los coordinadores de los centros de salud de la isla para prevenirles. Así, en caso de que hubieran sido usadas por profesionales en contacto con pacientes con Covid-19, estos tendrían que someterse a pruebas y cuarentenas.

Avisó el martes

El IB-Salut, que reiteró que más allá de en Primaria desconoce en qué otras gerencias ha sido distribuido el material bajo sospecha de no filtrar bien el aire, señaló que les alertó el pasado martes y que todavía no ha recibido ninguna comunicación de incidencias por parte de ninguna de ellas.

La fecha del aviso ha quedado corroborada en el informe del comité de crisis del hospital de Son Espases correspondiente al día siguiente, el pasado miércoles, el que se deja constancia de la inmovilización de las mascarillas por los motivos reseñados en esta noticia. Asimismo, fuentes del hospital de referencia aseguraron que estas mascarillas no han sido distribuidas entre su personal. "Alguna se repartió en el General y en el Psiquiátrico pero se retiraron. Ahora están todas bloqueadas en el almacén pendiente del resultado del contraanálisis de verificación", detallaron.