Los bares y restaurantes de Mallorca quieren abrir sus terrazas este verano, en cuanto termine el confinamiento obligatorio, según estiman.

Esta medida les permitiría, como explica Alfonso Robledo, presidente de Restauración CAEB, recobrar parcialmente la actividad redoblando las medidas higiénicas y de seguridad, así como recuperar parte de los ingresos y los puestos de trabajo perdidos desde que se decretó su cierre obligatorio.

"Se trata de una propuesta realista para que los bares y restaurantes con terraza del total de 9.500 que hay en Mallorca puedan abrir en temporada y recuperen así parte de su actividad antes de poder retomarla completamente a final de año, tomando las precauciones higiénicas para personal y clientes que sean necesarias", comenta. "Si los polígonos industriales ya están abiertos, no veo por qué los bares y restaurantes no pueden abrir sus espacios al aire libre, no los salones interiores, como han hecho en otros países de nuestro entorno", considera el presidente de la patronal de restauración.

Para la patronal, esta medida, a pesar de que no supondría una solución efectiva para todo el sector, sí que permitiría a la gran mayoría activar cierta parte del negocio con la que reestablecer parcialmente el funcionamiento de la actividad y recuperar, así, algunos puestos de trabajo, tener ingresos y, sobre todo, devolver algo de vida a las calles y plazas.

La entidad asegura que de forma paralela los propietarios de locales con terraza aplicarían medidas de seguridad extraordinarias para la protección de los trabajadores, tanto para el personal de cocina como el de sala.

La asociación insiste en una medida que considera de "sentido común", exigiendo a los ayuntamientos que sean, ahora más que nunca y a partir del nuevo escenario sanitario, mucho más permisivos en la concesión de más y mayores terrazas para garantizar la seguridad de los negocios de restauración, "de forma que con la separación de mesas se pueda cumplir con las normas de distanciamiento social", puntualiza Robledo. Todo ello con vistas a la propia actividad empresarial y sobre todo en vistas al servicio que necesitaran los clientes.

El sector de restauración en Balears, al igual que en Europa y los países más desarrollados del mundo, tiene ya una legislación muy completa en cuanto a la recepción, higiene, manipulación, y posterior gestión de los residuos, siendo la planta de restauración pionera en el conjunto de España como de las más vanguardistas y adelantadas del mundo, considera la patronal balear. Eso no es fruto de la casualidad, afirma la asociación, "si no del trabajo de la gran cadena de valor que ello conlleva, desde la materia prima, su elaboración y posterior servicio en mesa".