El Arxiu del Regne de Mallorca prosigue con su actividad El document del mes a causa de la situación de confinamiento derivada del coronavirus. El centro, dependiente de la conselleria de Presidència, Cultura i Igualtat, pone al alcance de los ciudadanos en su web (www.arxiuregnemallorca.com) la explicación de un documento del siglo XIII que reconstruye la historia de dos nodrizas asalariadas en la Ciutat de Mallorca.

Las nodrizas son mujeres que amamantan niños de otra madre, una práctica era muy común en la sociedad del Antiguo Régimen y que sobrevivió en el mundo occidental hasta el siglo XX. Se hacía para suplir la carencia de leche de la madre, por dolencia o deceso de esta, o incluso, en caso de que la madre no deseara criar a su hijo por tratarse de tareas consideradas inadecuadas a su nivel social. Ahora se ha conocido la historia de dos mujeres gracias a los respectivos contratos de amamantar que hicieron ante el notario, para dejar constancia de los compromisos de las partes.

El primer contrato de lactancia, el más antiguo documentado en el Arxiu del Regne de Mallorca, data del 8 de octubre de 1240. En él, Maria de Castelló d'Empúries promete a Bernat de Regull y a Ermessenda que amamantará a Maria, la hija de ambos. El informe también especifica que dará de mamar en casa de la nodriza y que lo hará con su leche.

El segundo contrato de lactancia es del 17 de junio de 1242. En este caso, la viuda Ferrera, que lo es de Ramon Figuera de Provençana, promete a Berenguer de Rees, notario de Mallorca, que amamantará su hijo Jaume durante un año y que cuidará de él lo mejor que pueda. Berenguer de Rees le pagará un total de 30 jornales.

La relevancia de estos documentos reside en la referencia a mujeres, que son muy escasas en la documentación. En este caso, lo hacen de una manera singular, siendo ellas mismas las protagonistas del documento y no a través de su marido o hijos, como es más habitual. Las dos nodrizas también son importantes porque se encuentran ejerciendo un oficio, aunque no es el único del que se tiene noticia. La presencia femenina en la documentación notarial medieval está, en buena parte, relacionada con los contratos matrimoniales y la gestión de los bienes que le corresponden según los pactos matrimoniales.

Estas referencias forman parte del Libro Manual de Pere Romeu, notario público de Mallorca (1239-1243). Se trata del libro notarial más antiguo conocido sobre la isla, uno de los diez primeros libros notariales de la primera mitad del siglo XIII de la Corona de Aragón. Pertenece a la serie Civitatis te Partis Foraneae de Escribanía de Cartas Reales (ECR) del fondo de Real Patrimonio del Arxiu del Regne de Mallorca, una fuente documental está datada solo diez años después de la conquista de Mallorca, durante el gobierno de Pedro de Portugal.

Pere Romeu es un ejemplo de notario público que llegó a la isla con la ocupación cristiana, prestando sus servicios a Ciutat de Mallorca. El hecho de que se trate de un notario público es una diferencia fundamental con respecto a otros documentos notariales de ese siglo conservados en la Corona de Aragón. En su mayoría de casos, se encuentran en un entorno eclesiástico, parroquial o episcopal, mientras que en Mallorca este notario ya aparece como funcionario público.