Las piezas de amianto en los edificios, tanto públicos como privados, deberán ser eliminadas antes de 2025. Es una de las principales medidas que contempla el nuevo Plan Sectorial de Residuos Peligrosos que aprobó ayer el Consell de Govern en su reunión semanal. Se iniciará el proceso en los edificios públicos y después se realizará un estudios sobre los privados que lo contengan, especialmente los tejados de fibrocemento (Uralita) que son considerados peligros y de los que todavía hay una gran cantidad. Balears es la primera comunidad autónoma de España en tener un Plan Sectorial de Residuos Peligrosos

Según explicó el conseller de Medio Ambiente y Territorio, Miquel Mir, el objetivo es que en el año 2025 no exista amiento en las edificaciones de las islas. También indicó que confían en que a partir del año que viene se reduzca en un 10% las 80.000 toneladas anuales de estos desechos que produce Balears. Apuntó que muchos de estos residuos son producidos por la ciudadanía, como es el caso de toners de impresora, fluorescentes, medicamentos o piezas de automóviles.

El plan director aprobado ayer por el Govern tendrá una vigencia de seis años, a pesar de que cada tres años se revisarán sus objetivos y su grado de cumplimiento. Comprende un total de seis programas, diez líneas estratégicas y 36 medidas. También se marca como objetivo, para antes del año 2024, recoger selectivamente y gestionar correctamente el 100% de los residuos peligrosos generados en el archipiélago. Además, se fomentará la construcción de las instalaciones de eliminación de residuos peligrosos que sean necesarias en aplicación de los principios de autosuficiencia y proximidad.

Instalaciones de residuos

En este sentido, hay que recordar que la diagnosis previa elaborada por la conselleria de Medio Ambiente y Territorio evidenciaba la necesidad de disponer de dos instalaciones específicas: un vertedero para eliminar residuos peligrosos y otro para eliminar residuos de construcción y demolición que contengan amianto.

Una de estas instalaciones es la que tiene Emaya y que este Plan de Residuos le da cobertura legal para poder tratar estos desechos, ya que hasta el momento debían ser enviados a la Península. De todas formas, el Govern impulsará otras instalaciones para la gestión y tratamiento en diferentes puntos de las islas.

Dado que no existe actualmente ninguna legislación o planificación autonómica, estatal ni internacional que obligue a retirar el amianto de los edificios públicos, se encarga a la conselleria de Medio Ambiente y Territorio la creación de un registro de los edificios y las instalaciones de titularidad pública, especialmente centros educativos y de salud, que contengan amianto.

Asimismo, se marca como objetivo haber retirado el amianto de los edificios de titularidad pública en 2025.Una medida que ya fue anunciada en 2018 y que todavía no se ha iniciado. Hay que recordar que existen muchos edificios públicos que en sus instalaciones tienen piezas de amianto, como es el caso del fibrocemento que fabricaba la marca Uralita. Estamos hablando de colegios, polideportivos municipales, institutos y todo tipo de infraestructuras. El nuevo plan contempla que la conselleria de Educación ponga en funcionamiento un servicio de recogida de residuos peligrosos en todos los centros educativos públicos y concertados Balears.

Por otro lado, se elaborará un estudio para analizar la presencia de fibrocemento con amianto en las cubiertas de los edificios de titularidad privada, que incluirá un plazo máximo de retirada obligatoria. El Conseller Miquel Mir indicó que sus intenciones es que en 2025 los edificios privados tampoco contengan piezas de amiento.

Los ayuntamientos de la islas deberán disponer de un servicio para la recepción y recogida gratuita de los residuos peligrosos de origen doméstico.