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Aeropuerto de Palma: 64 vuelos y menos de 1.600 pasajeros en una semana

A las puertas de Pascua, el aeropuerto cierra un inicio de abril en el que sigue bajando su operatividad

Aviones de Ryanair aparcados esta semana en el aeropuerto de Palma. controladores aéreos

El fin de semana en el que tendríamos que estar informando de los miles de pasajeros y vuelos programados en el aeropuerto de Palma en la antesala de Semana Santa, la noticia es que a Mallorca llegan menos viajeros de los que se van.

El Son Sant Joan cerrado a cal y canto excepto para pasajeros que vuelen por fuerza mayor bajo el estado de alerta -por trabajos esenciales o tratamientos médicos imprescindibles- cierra una semana en la que de lunes a viernes solo se contabilizan 64 vuelos, con 1.581 viajeros.

Llegan menos pasajeros de los que se van porque todavía queda un goteo de turistas o residentes extranjeros que siguen saliendo de la isla, como muestran los tres vuelos a Alemania (Fráncfort, Düsseldorf y Hamburgo) de Condor y Eurowings que operaron ayer en el aeropuerto.

Hemos pasado de que fuera el gestor aeroportuario, Aena, el que informaba de los miles de operaciones en el aeródromo mallorquín a que sea la Delegación del Gobierno la que da cuenta de los movimientos.

La Guardia Civil brinda el recuento del tráfico aéreo cada día a posteriori. Así ayer enumeró los vuelos del viernes: 14 en toda la jornada, con 108 pasajeros en llegadas y 143 en salidas. Datos irrisorios para un aeropuerto que hace un año, en el sábado previo a la semana de Pascua, registró 735 movimientos de aeronaves con 122.399 viajeros.

Poco a poco va bajando más el tráfico en Son Sant Joan. El domingo pasado fueron 411 los pasajeros que salieron de la isla y 243 los que llegaron. Ahora los vuelos diarios suelen oscilar entre 12 y 14, exceptuando los de repatriación que cada vez son menos.

Falta poder hacer recuento del total de los movimientos y pasajeros de este marzo que pasará a la historia. El mismo mes del año pasado Mallorca sumó 1,3 millones de viajeros. Y en abril, que incluyó las vacaciones de Pascua, superamos los 2,5 millones de pasajeros.

El tráfico actual del aeropuerto es el equivalente al nocturno, explicaba en este diario Mara Riosalido, portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) en Balears. Los movimientos son básicamente de cargueros y vuelos ambulancias, una vez que solo han quedado decretadas como servicios mínimos las rutas a Madrid y Barcelona y los vuelos interislas. Iberia Exprés Air Europa y Vueling son las únicas aerolíneas que operan en Balears.

La actividad en Son Sant Joan se ha reducido entre el 85% y 90%, según datos de USCA.

Desde enero

Forwardkeys, la firma de big data con sede en Valencia de análisis de reservas de viajes, informa de que entre el 30 de marzo y hoy la capacidad de asientos de aerolíneas internacionales ha descendido al 23% de la que se registró la primera semana de abril de 2019.

Hay en servicio 10 millones de asientos para "viajes esenciales", comparado con los 44,2 millones de plazas aéreas de hace un año, apunta Forwardkeys. El primer cuatrimestre de 2020 las plazas aéreas han caído un 9,4 % respecto a ese periodo del año pasado. La bajada empezó en enero, cuando el Gobierno chino anunció las restricciones de viajes y las aerolíneas suspendieron sus rutas con el país asiático, en pleno auge de la epidemia del Covid-19.

KLM, Qatar Airways y Ryanair han sido las compañías con más operaciones esta semana.

Cancelaciones

En España se operaron 71.000 vuelos durante la Semana Santa el año pasado. Los movimientos calculados para estos días de vacaciones, entre vuelos de cargueros y la mínima conectividad existente ahora en los aeropuertos españoles, no superan los 3.500, según datos de la Asociación de Líneas Aéreas. En abril se han cancelado unos 50.000 vuelos, señala su presidente, Javier Gándara. De ahí que la patronal de las compañías sigue insistiendo en que la UE debe permitir que los bonos sustituyan los reembolsos de los billetes, "para asegurar la liquidez" de las aerolíneas, porque ante los miles de devoluciones "hasta la compañía más fuerte quebraría". Y sin las aerolíneas "el turismo no va a salir adelante", insiste Gándara.

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