P Hemos pasado de recibir miles de pasajeros a mascarillas.
R El tráfico ha bajado muchísimo. Si en verano tenemos cinco sectores (el espacio aéreo se divide en zonas y si hay poco tráfico se unen), ahora tenemos uno solamente.
P¿Un sector para todo Balears?
R Sí. El tráfico ahora es el equivalente al que puede haber por las noches, cuando casi no hay y es cuando queda un sector. Ahora mismo solo hay cargueros, bastantes, vuelos nacionales (uno por destino al día de ida y vuelta) y ambulancias. Es bajísimo. En verano es impensable. Pasamos de mil operaciones al día a muy pocas. Los aviones de carga, de alimentos y productos esenciales y sanitarios se han incrementado. Vuelos internacionales no hay ninguno.
P ¿Los vuelos con mercancías son comunes fuera del estado de emergencia?
R Sí, la mayor parte de la carga a la isla llega en barco, pero mucha llega en avión también. Suele ser a primera hora de la mañana y de madrugada. Hay cuatro o cinco cada noche.
P ¿Cómo ha cambiado la actividad en el Centro de Control?
R Intentamos que haya los mínimos relevos posibles para evitar contacto entre un equipo y el otro. Cada relevo supone un trabajo grande en desinfección. Hay plásticos en las sillas. La gente va con mascarillas, desinfectamos cascos... Desde ayer en vez de haber turnos de ocho horas son de doce horas para evitar un relevo más durante el día. Por estos protocolos tan estrictos con Enaire hemos conseguido que no tengamos ningún caso. Ha habido personas en cuarentena por contactos remotos con positivos, pero nosotros no hemos tenido ninguno. Somos un servicio superesencial para la isla y ahí estaremos.
P ¿En los protocolos se había llegado a plantear trabajar en una situación de pandemia?
R Obviamente también nos hemos tenido que adaptar a la situación. Nadie se podía imaginar esto. Se ha actuado muy rápido y se han tomado las medidas lo más rápidamente posible. Y han sido muy efectivas. Hace un mes no podíamos pensar que fuera necesario.
P ¿Habrá ERTE en su gremio?
R No sabría decirle. Creo que seguimos siendo un servicio esencial, tenemos que estar ahí para cuando todo esto acabe. Piense que hemos estado muchísimos años sin renovar personal, estando por debajo de las necesidades que había. Sería una buena oportunidad para seguir incorporando personal y de que cuando todo esto pase tengamos las dotaciones necesarias para asumir el tráfico que venga. Aunque ahora estemos con la mayor parte de la plantilla sin ir a trabajar, tendremos que estar en primera línea para cuando todo esto se recupere. No creo que nos podamos permitir reducir el personal, que ya estaba bastante menguado.
P ¿Los militares están interviniendo en el control aéreo?
R No se entiende bien eso de que ellos puedan coger el control aéreo. La formación es larguísima y exige muchísimas certificaciones. En ningún momento ha pasado que un militar pudiera coger las atribuciones del control de un día para otro y en esta situación no se espera. No va a suceder.
P Me refería a si hay coordinación con el Ejército.
R Siempre hay comunicación, durante todo el año estamos supeditados a cualquier decisión que tomen. Si necesitan venir a hacer prácticas pues se cierra el espacio de la zona para las maniobras. A día de hoy, para cualquier colaboración que necesiten, estamos siempre. Eso nunca va a cambiar y mucho menos ahora.
P¿Qué se ve ahora desde la Torre de Control?
R Hay cero movimientos. Algunos aviones aparcados de compañías que ahora no pueden operar. El panorama es extraño, de una terminal de tanto movimiento a un poco fantasma, sobre todo ahora que empezaba la temporada. Me recuerda a hace unos años cuando hubo la erupción del volcán de Islandia. Fue parecido, con un silencio total de repente.
P ¿Hay vuelos de mantenimiento, para quemar combustible, etc.?
R Aquí no. Por comentarios sé que se está haciendo alguno en Barcelona. Para las compañías tener un avión parado es un problema, no solo por lo que le cuesta tenerlo aparcado sino porque si lleva un tiempo sin volar para volver hacerlo exige un mantenimiento importante, una revisión muy cara.
P Ustedes volvieron a las noticias con la declaración del estado de alarma.
R Bueno, nos molestó un poco que Pedro Sánchez dijera que era la primera vez que sucedía en democracia, cuando sabe perfectamente que no. No sé qué le llevó a ese tipo de afirmación. Pero no hay ningún problema, estamos para arrimar el hombro todo lo que podamos.
P ¿El envejecimiento de sus plantillas también se palpa en Palma
R Sí, la media de edad es aproximadamente de 55 años. En otros países es a la que los controladores se retiran. Aquí lo hacemos a los 67, como todos. Un controlador mayor va teniendo más problemas para completar los turnos de noche, que son muy duros. Esta profesión no debería llevarse tan al límite. Con esta epidemia a los mayores de 60 años se les ha retirado de la frecuencia para evitar situaciones de riesgo.
P Hace nada el gran tema de Son Sant Joan
R Bueno, nosotros no tenemos nada que decir ahí realmente. Tenemos nuestras opiniones personales sobre si el turismo ha llegado ya a su máximo o no, que eso es otra cosa.
P ¿ Y usted qué opina?
R El turismo ha llegado a ser un poco excesivo. Habría que limitar la afluencia de gente porque ya los servicios estaban un poco saturados. Con todo esto la visión se ha cambiado y nos damos cuenta de lo dependientes que somos del turismo. Ahora lo que hay que ver es cómo recuperar los niveles que teníamos pero de una manera más racional, cuidando un poco el medio ambiente.
P Se han visto despedidas nostálgicas entre pilotos y controladores.
R La relación es muy cercana y nos apoyamos mucho. Cuando hay un problema con cualquier compañía les animamos. Vamos en el mismo barco en diferentes sitios. Son situaciones personales muy duras las que están pasando. Esperemos que todo remonte y para mejor.
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