El Consell de Mallorca repartirá en las próximas semanas 3,6 millones de euros entre los ayuntamientos de la isla para que puedan dar ayudas de emergencia que cubran las necesidades básicas de familias vulnerables. La presidenta de la institución insular, Catalina Cladera, ha detallado que este dinero procede del superávit de dos millones del ejercicio del pasado año, más 1,6 millones que son de fondo de contingencia del propio Consell y del Govern.

Cladera ha explicado hoy en su comparecencia que esta línea de ayudas es una de las demandas que le han hecho llegar los alcaldes, con los cuales ha mantenido reuniones periódicas vía videoconferencia. "Los ayuntamientos son los que están en primera línea de los servicios sociales y por ello estas ayudas servirán para que las familias que esta crisis está convirtiendo en vulnerables no queden atrás", ha indicado la presidenta de Mallorca.

Por otra parte, el Consell ha hecho llegar al Estado y ha pedido que también se negocie con la Unión Europea la necesidad de liberar los 500 millones de euros que los ayuntamientos mallorquines tienen inmovilizados por la regla de gasto, conocida también como Ley Montoro. Esta norma impede destinar el dinero procedente de superávit a inversiones o servicios sociales, solo permitía enjugar la deuda. Cladera ha relatado que el decreto ley del Gobierno que se publica hoy autoriza la utilización de un 20% y ello ha permitido utilizar el remanente del ejercicio de 2019. No obstante, consideran que no es suficiente. "Estos 500 millones aproximados, más unos 27 que tiene el Consell en esta misma situación, deben servir para la reconstrucción social y económica que deberemos hacer tras la crisis del coronavirus", ha recordado Cladera.

La presidenta del Consell también ha explicado que el teléfono gratuito de ayuda psicológica, el 900100444, habilitado por la institución ha recibido más de 400 llamadas en una semana de personas exponiendo sus problemas. Cladera ha apuntado que en la mayoría de los cosas se están dando soluciones. También ha indicado que hoy se abre la novena planta de la residencia de la Bonanova para ancianos sin coronavirus procedentes de otras residencias. Ha criticado al PP, sin nombrarlo, por crear alarma con el anuncio de legionela en el polideportivo de Sant Ferran, donde se están albergando las personas 'sin techo' durante su confinamiento.