El coronavirus ha mejorado notablemente la calidad del aire en Mallorca. Un informe del Govern ha revelado que la concentración de contaminantes en la isla se ha desplomado un 61 por ciento debido a la drástica reducción del tráfico por el confinamiento para frenar la pandemia. El estudio evidencia también importantes caídas en el resto de Balears, pues en Eivissa ha descendido un 50 por ciento y en Menorca, un 22. Sin embargo, en algunos momentos del día las emisiones siguen siendo elevadas, lo que a juicio del director general de Energía y Cambio Climático, Aitor Urresti, evidencia la necesidad de "replantear la movilidad" en las islas.

El informe elaborado por este departamento de la conselleria de Transición Energética y Sectores Productivos y hecho público ayer compara el impacto ambiental que ha tenido la declaración del estado del alarma el pasado 14 de marzo en la calidad del aire del archipiélago. Para ello, se ha analizado la concentración de dióxido de nitrógeno en las estaciones más representativas de cada isla.

En el caso de Mallorca se escogió la de Foners, situada en la confluencia con las Avenidas, una de las vías con mayor densidad de tráfico de la isla. En este punto se ha detectado que la concentración de este compuesto ha descendido un 61 por ciento tras el confinamiento general ordenado hace dos semanas, que redujo de forma muy notable el tráfico en toda la ciudad. Mientras en la primera quincena de marzo el valor horario medio fue de 27 microgramos por metro cúbico, tras la declaración del estado de alarma ha sido de 11 microgramos.

Esta reducción ha provocado que la calidad del aire en los últimos días haya pasado a ser considerada excelente. Sin embargo, Urresti recuerda que se partía de unos niveles muy bajos y ya considerados buenos.

En el resto del archipiélago la evolución ha sido también muy positiva. En el caso de Eivissa, los niveles de dióxido de nitrógeno han caído a la mitad en la estación de medición situada en la zona de Can Misses. En Menorca, donde se han analizado los resultados se ha constatado una reducción del 22 por ciento en la estación de Pous, ubicada en Maó.

Replantear la movilidad

La dirección general de Energía y Cambio Climático señala, pese a este importante descenso en las emisiones contaminantes, que estas continúan siendo elevadas en algunos momentos del día. Por ello, el responsable del departamento, Aitor Urresti, incidió ayer en la necesidad de "replantear la movilidad" en las islas e impulsar el modelo que prevé la Ley de Cambio Climático y Transición Energética "cuando la coyuntura sanitaria lo permita". Este plan apuesta por la movilidad eléctrica y el uso del transporte público compartido y el no motorizado, recordó.