El Consejo de Ministros tratará de concretar hoy un paquete de medidas para ayudar a afrontar la renta a los inquilinos afectados por la emergencia sanitaria. Los de Mallorca son especialmente vulnerables porque buena parte de ellos están afectados por un ERTE y, además, soportan unos alquileres muy por encima de la media del Estado. Por ello, el Govern balear ha solicitado por escrito al Ejecutivo de Pedro Sánchez que adapte sus medidas a la realidad -y los precios- del archipiélago.
El Gobierno central contempla un amplio abanico de propuestas que incluye una moratoria del pago de las rentas, la concesión de microcréditos sin intereses para que los inquilinos puedan abonar la mensualidad y compensaciones económicas para los propietarios que a menudo necesitan esa renta para completar sus ingresos.
Las diferencias entre PSOE y Unidas Podemos sobre cómo abordar la emergencia de los inquilinos han impedido hasta ahora la aprobación de este paquete de ayudas que el Gobierno ha cifrado en unos setecientos millones de euros.
El Govern balear ha pedido a Madrid que atienda a la singularidad del archipiélago en materia de vivienda y que amplíe el espectro de beneficiarios a inquilinos que paguen alquileres de hasta 900 euros. La conselleria de Vivienda y Movilidad considera que bajar este umbral "podría dejar fuera a muchas personas afectadas en Balears, con precios de alquileres que superan fácilmente los 600 euros".
El departamento que dirige Marc Pons teme que las ayudas que concrete hoy el Consejo de Ministros se restrinjan a inquilinos que pagan rentas en torno a los 600 euros porque esa fue la cifra elegida como referencia en la aprobación de la moratoria de las hipotecas.
En este sentido, el Govern balear también reclama a Madrid que las ayudas a los hipotecados de Balears se extiendan a los préstamos que superen los 600 euros porque esa cifra "no se ajusta a la hipoteca media que se paga" en el archipiélago.
Asimismo, la conselleria de Vivienda reclama al Ejecutivo de Pedro Sánchez que atienda la problemática de los inquilinos e hipotecados que sean fijos discontinuos, "una figura laboral regulada y con mucha incidencia a las islas por la estacionalidad de la industria turística".
Este "colectivo vulnerable" no ha podido acceder a sus puestos de trabajo porque la temporada turística no ha empezado a causa de la emergencia sanitaria y ni tan siquiera hay una previsión de cuándo podrá arrancar.
Habrá que ver si esta vez el Gobierno de Sánchez accede a las demandas de Balears o se convierten en papel mojado.
Ayudas al alquiler
Una de las peticiones planteadas por el Govern a Madrid es que agilice el pago de las ayudas al alquiler que la conselleria de Vivienda convoca cada año. La convocatoria de 2019 se cerró con más de 5.200 solicitudes, una avalancha que obstaculiza su tramitación. "Pedimos la flexibilización del régimen de las ayudas de alquiler (...) para poder acelerar su concesión y pago de manera rápida. La propuesta es que la comprobación de los requisitos se haga a posteriori", indicó el Govern.
Todavía no hay fecha para la publicación de la lista provisional de beneficiarios de las ayudas de 2019.
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