Los centros educativos han comenzado a citar para el lunes a los padres de los 6.152 alumnos beneficiarios de becas comedor para entregarles las tarjetas monedero prepago cargadas con cinco euros diarios, que podrán utilizarse en los establecimientos de alimentación para comprar víveres. De acuerdo con las instrucciones para el reparto enviadas a los equipos directivos por parte de la conselleria de Educación, cuando los padres o tutores del alumno acudan a recogerlas deberán firmar una declaración responsable en la que, además de sus datos, se comprometen a conservar "los justificantes de compra de los alimentos junto con los justificantes de pago durante un plazo de 4 años".

Junto a ello, en la declaración responsable se comprometen a destinar los fondos de la tarjeta monedero a "la adquisición de alimentos de primera necesidad". Además, si bien las tarjetas se recargarán mientras dure el estado de alarma y la suspensión de las clases presenciales, en la misma declaración que deberán firmar los padres se establece que los gastos de alimentación "serán realizados antes del 1 de enero de 2021".

El Govern acordó la distribución de estas tarjetas monederos para suplir las becas comedor el pasado día 19. Su intención era haberlas repartido durante esta semana, pero "las medidas de seguridad y de movimiento han hecho que las tarjetas sufran un retraso en la entrega", según explica la Conselleria en las instrucciones a los centros para la entrega.

La tarjeta monedero, con el apoyo de CaixaBank, estará cargada por el total de días que dure la interrupción del servicio de comedor como consecuencia de la suspensión de la actividad educativa. La primera carga será de 60 euros y de forma automática se irá recargando según se alargue el tiempo de suspensión de la actividad. La medida estará vigente hasta que el Govern deje sin efectos la suspensión de la actividad educativa presencial adoptada para limitar la propagación y el contagio de coronavirus.

En estas instrucciones se especifica que los centros deberán dar un margen de 10 a 15 minutos entre cada beneficiario para la recogida, que se podrá ampliar en aquellos con un bajo número de alumnos con beca comedor. Si la familia del alumno está en cuarentena, la tarjeta se guardará en el centro educativo. En las llamadas para citar a los padres, los centros deben recomendar que acuda a recogerlas una sola persona por familia y "no podrán acudir usuarios sintomáticos de infección respiratoria aguda, tendrá que ir otro familiar asintomático".

Además, "dentro de lo posible", se recomienda que las familias no entren en los edificios de los centros escolares, por lo que "los puntos de entrega se dispondrán en las barreras de acceso a los recintos, los porches de acceso al centro o las ventanas bajas si permiten entregar las tarjetas". Si no fuera posible estas indicaciones, "se utilizarán los espacios más ventilados del centro, garantizando las medidas sanitarias", además de mantener "una distancia de dos metros con los familiares de los beneficiarios".

Según informaron algunos padres que ayer recibieron la llamada del centro escolar para citarles para el lunes, se les sugirió que acudieran si fuera posible con guantes y mascarilla e incluso con su propio bolígrafo. Sin embargo, en sus instrucciones la Conselleria afirma que enviará guantes desechables además de las tarjetas y que los centros deberán tener tantos bolígrafos como beneficiarios, además de fotocopias de las tiendas de alimentación y dos fotocopias de las declaraciones responsables por beneficiario.

"Tendremos que ser ágiles en la entrega y a la vez mantener calidez en la relación, si bien mantendremos la distancia de seguridad", se añade en las instrucciones. El procedimiento comenzará con la identificación de la persona que acuda, a la que se informará del funcionamiento y los deberes que constan en la declaración responsable, que deberán firmar antes de la entrega de la tarjeta y del listado de tiendas.