La consellera de Adricultura del Govern, Mae de la Concha, ha anunciado hoy la puesta en marcha de un plan de choque con ayudas de 1,8 millones de euros a agricultures, ganaderos y pescadores para que puedan garantizar su producción, el abastecimiento a la población confinada por el coronavirus y el mantenimiento de precios justos. Se trata de medidas, según De la Concha, que tienen el beneplácito de la Unión Europea y se han sacado de remanentes de la propia Conselleria y también de fondos europeos. La consellera de Agricultura también ha explicado que las grandes cadenas de distribución, pese a que tienen un sistema de compra centralizado, están en conversaciones con los productores de las islas para incluir los productos locales en sus supermercados.

Hay que tener en cuenta que el principal mercado de los agricultores, ganaderos y pescadores de Balears son los mercados y restaurantes. Este último sector está del todo paralizado y muchos payeses y pescadores tienen dificultades para poder comercializar sus productos en estos momentos de confinamiento.

Por este motivo, Mae de la Concha ha anunciado ayudas inmediatas de 400.000 euros al sector pesquero para que pueda seguir manteniendo abierta la lonja de Palma y proporcionar liquidez a las embarcaciones que siguen saliendo a faenar cada día para abastecer de pescado a la población. Otros 400.000 euros se destinarán al sector ganadero de ovino, caprino y vacuno con la finalidad de que pueda mantener el almacenaje de las reses y sacarlas al mercado en función de la demanda. Para el sector lácteo se les proporcionará 250.000 euros en ayudas con el objetivo de que sigan manteniendo la actividad y la rueda de producción.

Al sector de frutas y hortalizas se destinarán 300.000 euros para la creación de una gran plataforma de comercialización que les ayude a sacar sus productos al mercado. También se destinará una parte de ayudas a la exportación de la patata y a la búsqueda de mercados alternativos para el sector vinícola de las islas. Este último es uno de los sectores agrarios con más dificultades, ya que gran parte de su producción estaba destinada a bares y restaurantes locales. Mae de la Concha también anunció la compra pública de frutas y hortalizas y una línea de créditos blandos para las empresas del sector primario.