Mil enfermos y cincuenta fallecidos por coronavirus en Balears no es una hipótesis, sino una estimación conservadora del impacto de la pandemia si se mantiene el ritmo actual en los próximos días. La barrera psicológica del millar de afectados, y de las decenas de víctimas mortales correspondientes, se puede alcanzar antes del final de este mes de marzo. De hecho, se habrá superado con creces el martes que viene, de proseguir la tendencia ahora instalada con una importante aceleración diaria.
Tras el espejismo del pasado lunes, que supuso una aparente ralentización de la ley que establece que Balears detecta cada día más contagios que el anterior, el recuento de casos diarios ha vuelto a dispararse. Los 478 enfermos del martes se elevaban ayer a 562. El margen de 84 nuevos afectados se inscribe en el aumento cotidiano, con un incremento de 78 entre lunes y martes. De no mediar un sobresalto, es fácil proyectar con estos antecedentes que el millar de positivos se superará en cuatro o cinco días, siempre dentro de este mes de marzo.
El avance de la infección se mide aproximadamente en un veinte por ciento diario de aumento del número total de casos, que ayer se concretó en un 18. Este porcentaje sirve para calcular un índice crucial en epidemiología, los días necesarios para duplicar el número de contagios. Balears ostenta uno de los coeficientes más bajos de España en esta categoría, porque dobla los enfermos documentados cada 3,5 días. Para entender la preocupante situación de la comunidad, hasta quince regiones presentan mejores cifras en este apartado. En un nuevo concepto de la solidaridad epidémica interregional, es importante que las restantes autonomías contengan sus datos de crecimiento, lo contrario implicaría la difusión descontrolada de una enfermedad que ha alcanzado proporciones dantescas en Madrid y que se propaga muy por encima de las proporciones demográficas en Cataluña.
El coronavirus ha arrasado con frecuencia las predicciones incluso al alza. Pedro Sánchez se arriesgó a señalar el horizonte de los diez mil afectados, que se había superado con creces en las fechas previstas por el presidente. Por encontrarle una faceta positiva a los datos suministrados ayer por el Govern, por primera vez no se ha doblado el número de enfermos en tres días, pues se ha saltado de 331 a 562 en ese lapso. A esta aparente reducción de márgenes contribuye la magnitud ya instalada de la pandemia. Se desacelera la progresión pero no la presencia creciente del problema, se divisa la cima de la montaña.
El millar de afectados conllevará una cuota de fallecimientos, que puede medirse sobre los infectados totales, aunque es más lógico hacerlo sobre los casos cerrados, comparando con las altas. Las 19 muertes por coronavirus verificadas hasta ayer giran en torno al cuatro por ciento de contagiados, pero suponen prácticamente la mitad de los expedientes resueltos. El martes se superó la cifra de víctimas mortales de la tragedia de Sant Llorenç, donde trece muertos causaron una conmoción social. De mantenerse las proporciones actuales, la próxima semana se llegará al medio centenar de fallecimientos.
Aunque los datos son todavía demasiado escasos para acometer un balance parcial, la media de fallecidos en Balears está por debajo del cuatro por ciento de casos. Este trágico balance es inferior al siete por ciento del conjunto del Estado, inflado por los porcentajes de víctimas mortales en dos cifras que registra Madrid. Aunque hay comunidades con más afectados y menos mortalidad, los datos demuestran un funcionamiento eficaz del sistema sanitario balear, sin síntomas inminentes de colapso.
España ha medido muy mal la penetración del coronavirus, por lo que los datos oficiales suponen apenas una fantasía frente a los datos reales de contagio, hasta el punto de que se critica que solo se haya arañado el cinco por ciento del total. Todos los modelos utilizados para estimar el número de españoles actualmente afectados miden la presencia en centenares de miles de personas, en una horquilla que oscila entre los 300 y los 900 mil, con el dato de mayor rigor científico en torno al medio millón. Admitiendo estas proporciones razonables, el número de contagiados en Balears se movería ya entre los cuatro mil y los once mil.
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