El Ayuntamiento de Palma cierra los parques infantiles, las escoletas públicas, casi todas las oficinas de atención ciudadana, las bibliotecas y otras dependencias municipales a partir de mañana, según anunció ayer el alcalde de la ciudad, José Hila, quien compareció justo después de que el presidente del Gobierno declarara el Estado de Alarma por el coronavirus.

Cort amplía las medidas anunciadas el pasado jueves para evitar la propagación del virus. Siguiendo la consigna de que hay que permanecer en casa, el Ayuntamiento ha decretado el cierre durante quince días de áreas lúdicas, como los parques y jardines, las zonas infantiles, que en caso de no tener cerramiento quedarán acotadas, las instalaciones deportivas y las de atención a la ciudadanía, ya que los trámites deberán realizarse telemáticamente. Tan solo abrirán y para atender gestiones que no se puedan resolver de otra manera, las oficinas de avenidas, Cort y s'Escorxador.

Las bibliotecas, el castillo de Bellver y los centros culturales Casal Solleric, Can Balaguer y la Fundació Miró cerrarán también durante un mes.

El Ayuntamiento también ha decidido suspender la prueba convocada por la Policía Local, prevista para este sábado a las nueve de la mañana y a la que debían presentarse 160 aspirantes. Precisamente que se mantuviera este examen había provocado quejas de los opositores.

Hila ha anunciado que las bodas civiles programadas se trasladarán al patio del castillo de Bellver y con un máximo de 30 asistentes. En este punto, el alcalde añadió que muchos enlaces estaban siendo aplazados por iniciativa de la pareja.

Los mercados municipales de alimentación se mantedrán abiertos, pero no los de artesanía de la plaza Major y de Son Fuster.

La EMT continuará con su servicio por considerarse "esencial", aunque se instalarán recomendaciones para el pasaje de extremar la higiene personal.

PalmaActiva y la Escuela de Formación suspenden acciones formativas y cursos.