"La Semana Santa está arruinada. El autor de la frase es el secretario general de CCOO en Balears, José Luis García, pero previamente ya había sido expuesta, de forma más o menos rotunda, por algunos de los representantes empresariales que acudieron ayer al encuentro convocado por la presidenta Francina Armengol con los agentes sociales, administraciones públicas y otras organizaciones para abordar el problema del coronavirus. La vicepresidenta ejecutiva de la federación hotelera de Mallorca, María José Aguiló, no ocultó que en la crisis de 2008 el sector turístico siguió funcionando, mientras que ahora se está produciendo un parón en todos los mercados emisores. La diferencia es que la primera se prolongó durante años, mientras que la actual está vinculada a un problema sanitario que se espera que quede superado en unos meses. Por su parte, Armengol admitió que el momento es "delicado".

La reunión celebrada en el Consolat de Mar, en la que la presidenta estuvo acompañada por varios de sus consellers (como los titulares de Sectores Productivos, Modelo Económico, Presidencia, Servicios Sociales, Salud y Hacienda) sirvió para que se pusieran sobre la mesa las medidas que el Govern pide a Madrid, y que patronales y sindicatos, entre otros, piden al Ejecutivo balear, que además se irán tratando en una mesa que se va a crear al efecto como también se hizo durante la caída del turoperador Thomas Cook.

Las medidas que ayer se pusieron sobre la mesa incluyen la creación de un grupo de seguimiento de los expedientes de regulación temporal de empleo que se vayan a poner en marcha para reducir plantillas, con la participación de Govern, patronal y sindicatos, para controlar que la bajada de puestos de trabajo sea solo la imprescindible. En este sentido, antes de la reunión UGT fue muy duro con el grupo Meliá, al que acusó de estar despidiendo a trabajadores (unos 15 en las islas y alrededor de 200 en toda España) con carácter definitivo y alegando la caída de reservas, lo que se calificó como una "pasada de frenada".

Armengol va a pedir al presidente español Pedro Sánchez, con el que va a mantener una videoconferencia el sábado, que todos los empleados que pierdan su puesto de trabajo en este contexto puedan cobrar una prestación por desempleo pero sin que se les descuente del tiempo al que ya tienen derecho, y que las bonificaciones en las cotizaciones de los fijos-discontinuos se extiendan a abril y mayo.

Además, se reclaman líneas de crédito para que las empresas dispongan de liquidez para hacer frente a los gastos de las próximas semanas. En este sentido, el próximo lunes se celebrará un encuentro entre el Govern y las entidades financieras de las islas para tratar este punto.

La presidenta balear anunció también que va a mantener encuentros con los grupos de la oposición y va a comparecer en el Parlament para abordar este tema, al considerar que ante una crisis como ésta la "unidad" es fundamental.

Parón a la ecotasa y al IVA

La vicepresidenta ejecutiva de los hoteleros de Mallorca también formuló un paquete de peticiones a los Ejecutivos balear y estatal. Al primero, le reclamó que paralice provisionalmente la aplicación de la ecotasa en un momento en el que se está recortando de forma notable la llegada de visitantes, y al segundo que paralice el pago del IVA, ya que los hoteleros lo abonan por módulos y se pueden encontrar con el problema de tener que abonar un impuesto sin que los clientes hayan llegado realmente al establecimiento. Aguiló indicó que su sector también ha exigido medidas destinadas a garantizar la liquidez de las empresas.

A su vez, la presidenta de CAEB, Carmen Planas, defendió la necesidad de que las Administraciones actúen con flexibilidad y reclamó diálogo social a la hora de adoptar medidas. En este sentido, recordó que lo que está sucediendo es "gravísimo" desde el punto de vista económico, lo que implica un duro impacto sobre el empleo.

El presidente de PIMEM, Jordi Mora, se sumó ayer a las voces que reclamaron una moratoria en el pago de impuestos como el IVA y en las cotizaciones a la Seguridad Social, además de medidas para dar liquidez a las empresas, entre otras.

Por su parte, los secretarios generales de UGT y CCOO en las islas, Alejandro Texías y José Luis García respectivamente, insistieron en que el convenio de hostelería permite una notable flexibilidad en el llamamiento de los trabajadores fijos-discontinuos. Además, se reconoció que, a diferencia de lo sucedido en 2008, el parón económico que se está dando a causa del coronavirus está siendo "muy brusco", pero se hizo un llamamiento a la tranquilidad por parte de todos los asistentes al considerar que se trata de un problema muy temporal.