La avalancha de clientes que durante los dos últimos días han recibido las grandes empresas de distribución de alimentos de Mallorca ha supuesto aumentos en sus ventas de un 35%, según los datos facilitados por una de las grandes cadenas implantadas en la isla, intensificando aún más la comercialización de algunos productos que ya había aumentado notablemente durante las dos semanas previas a causa del coronavirus.

Este elevado volumen de ventas ha obligado a estas empresas a adoptar medidas adicionales para evitar dar una imagen de desabastecimiento que pudiera agravar la psicosis que parece haber invadido a los clientes, que se han volcado para hacer acopio de alimentos no perecederos, entre otros productos. Como anécdota, señalar que el fuerte aumento en la demanda, que ha afectado también a los desinfectante de manos hasta el punto de agotarlos en algunos locales, se ha dado incluso con el papel higiénico.

De este modo, fuentes del sector han señalado que si lo habitual es reponer los estantes una vez al día, se ha optado por reforzar este servicio varias veces por jornada, para que éstas estén vacias el menor tiempo posible. Incluso alguna empresa optó ayer por desplazar personal de otros departamentos a sus supermercados para intensificar estas reposiciones.

Porque el objetivo de estas cadenas es frenar la psicosis que está llevando a muchos consumidores a hacer acopio de alimentos, insistiendo en su mensaje de que no hay riesgo de que se produzca desabastecimiento.

Un aspecto subrayado es que no en todos los supermercados de Mallorca se ha registrado esa avalancha de clientes durante los dos últimos días, lo que hace que los consumidores de la isla tengan la opción, si no encuentran algún producto en un supermercado, de acudir a otro próximo, dado el elevado número de este tipo de comercios existente en cada barrio.

En opinión de representantes del sector, lo sucedido en la isla durante el martes y el día de ayer se explica por la imagen de colas en supermercados de Madrid que se emitió en la primera de esas jornadas.

"Parece que la gente se está anticipando a posibles cuarentenas", señala uno de los responsables de estas firmas.

En cualquier caso, se insiste en que el transporte marítimo está operando sin problemas, lo que permite garantizar el suministro a las islas.

En este sentido, el eurodiputado mallorquín de Ciudadanos, José Ramón Bauzá, pidió a la Comisión Europea que en los trayectos con las islas suspenda el impuesto por emisiones de azufre que abonan las navieras, para evitar un encarecimiento de productos y garantizar que no se va a dar escasez de ninguno de ellos.