Una parte de la sociedad está registrando "un aumento de la desconfianza en el sistema económico y político" a causa de las incertidumbres y los cambios que se están registrando en estos momentos, según subrayó ayer en Palma el presidente de CaixaBank, Jordi Gual, que además hizo un llamamiento a las empresas para que desarrollen una función social "que vaya más allá de la maximización de sus beneficios y que estén comprometidas con el entorno y la sociedad a la que sirven".
Gual impartió ayer una ponencia en un acto organizado por la Fundación Impulsa sobre La empresa y los retos de la nueva década, al que asistieron también la presidenta del Govern, Francina Armengol; su homóloga en CAEB, Carmen Planas; la directora territorial de la citada entidad financiera en las islas, María Cruz Rivera, y el director de la fundación, Antoni Riera.
Jordi Gual consideró que el mundo empresarial tiene tres grandes retos por delante y ante los que no pueden permanecer pasivos, como son combatir los discursos populistas que cuestionan la legitimidad del sistema económico y social; la transformación digital; y hacer frente al cambio climático.
Por su parte, Antoni Riera señaló que el tejido empresarial balear está atravesando un buen momento para movilizar nuevos recursos, al registrar una rentabilidad del 15,2% y un avance de la productividad del 4,8% nominal, con una "consolidación de las estructuras patrimoniales saneadas".
