Los responsables de la asociación Aliança Mar Blava confían en que este año quede definitivamente prohibido realizar cualquier tipo de prospección de hidrocarburos en aguas del Mediterráneo. Así lo anunciaron en la reunión que se celebró ayer en Palma para analizar los logros que se han conseguido en favor de la protección natural.

Sara Pizzinato, secretaria técnica de esta alianza, anunció ayer que de momento han quedado archivados los trámites de evaluación del proyecto de investigación de hidrocarburos Medsalt-2, impulsado por el oceanográfico de Italia, que pretendía realizar prospecciones en una zona entre Eivissa y Formentera. Este proyecto, además, venía financiado por varias empresas petroleras, por lo que se ha sospechado desde el principio que el objetivo de este estudio era obtener combustible.

La presidenta de Aliança Mar Blava, Verónica Núñez, explicó que se está trabajando para conseguir que el Gobierno apruebe la ley de cambio climático, un texto que debería ser similar al que se aprobó en Balears, que representaría la prohibición definitiva de cualquier proyecto de investigación en el fondo marino.

Núñez explicó que si esta ley sale adelante, ya no habrá ninguna posibilidad de que se apruebe, o que se prolongue, ninguna autorización para realizar prospecciones en las aguas nacionales.

El proyecto que encabeza esta asociación cuenta con apoyo público y privado. Así, en la asamblea de ayer también estuvo presente Patricia Giménez, del ayuntamiento de Barcelona, y Víctor Carretero, del Gob de Menorca. La reunión se celebró en la sede de Pimem, con la asistencia de su presidente, Jordi Mora.

Otro de los proyectos que está encabezando esta asociación ha sido la presentación de un recurso ante el Tribunal Supremo, con el que se pretende que se anule la explotación de hidrocarburos de la base Casablanca, que está situada frente al delta del Ebro. Mar Blava considera que el Gobierno ha aprobado prolongar diez años la autorización de esta explotación sin haber realizado el obligado trámite de estudiar el impacto ambiental de este proyecto.

Otro de los logros conseguidos en esta lucha ecológica ha sido la declaración del corredor de migración de cetáceos como zona especialmente protegida para el Mediterráneo.