El sector aéreo es el primero que está padeciendo el miedo a volar por el coronavirus, sobre todo por el temor de los viajeros a quedarse aislados. A los recortes de rutas que ya anunció easyJet y los ajustes de capacidad que están llevando a cabo las compañías ligadas a Iberia, ahora es British Airways, también del grupo IAG, la que ha anunciado la cancelación de cientos de vuelos ante la caída de la demanda. Mallorca se libra, por ahora.

A las reducciones en las rutas con Italia, común en la mayoría de las compañías, British anunció ayer que por la propagación del Covid-19 reducirá sus vuelos a Nueva York, Italia, Francia, Austria, Bélgica, Alemania, Irlanda, Suiza y Albania, entre el 16 y el 28 de marzo. La aerolínea de IAG avisa que no está cancelando ninguna ruta, si no reduciendo el número de vuelos. Los cambios de fecha no tendrán recargo y también se permite el reembolso.

Ryanair también reducirá una cuarta parte sus frecuencias, medida que afectará sobre todo a los aeropuertos italianos.

A las políticas de flexibilidad en el sector turístico se ha unido Meliá Hotels International, que hasta mañana tiene activa una campaña de reservas con derecho a libre cancelación por el virus.

Próximo impuesto aéreo

Por otro lado, ante el anuncio del Gobierno central de poner en marcha un impuesto en el transporte aéreo, el conseller de Turismo, Iago Negueruela, destacó ayer que Madrid tendrá en cuenta "el hecho insular", por lo que descarta que pueda perjudicar al sector turístico balear.

Sin embargo, los hoteleros, a través de su patronal nacional, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), de la que forma parte la FEHM, consideran la medida "una irresponsabilidad" en estos momentos de incertidumbre, por la situación de conectividad de los archipiélagos y la crisis por los casos de coronavirus detectada en varias provincias.