La conselleria de Medi Ambient ha actualizado el mapa cartográfico de Balears, en el que se aprecian los cambios geográficos que ha supuesto la última gran torrentada de Sant Llorenç, que también afectó a otras localidades próximas. Las imágenes, que son de gran calidad, demuestran los cambios que han sufrido estas zonas. Esta actualización cartográfica fue presentada ayer por el conseller de Medi Ambient, Miquel Mir, que destacó la importancia que representa para la administración, y también para el sector privado, tener acceso a esta información actualizada, porque permite "entender y gestionar" el territorio. Esta nueva actualización se basa en las fotografías aéreas realizadas por la dirección general del Instituto Geográfico Nacional. A estas imágenes se les ha aplicado las últimas herramientas tecnológicas, gracias a su gran calidad, que permiten tener un mejor detalle de la situación actual del territorio.
Paco Darder, jefe del área técnica del servicio de información territorial de Balears, explicó que se han mejorado los algoritmos de tratamiento de imagen, a la vez que se ha utilizado la tecnología más avanzada para sacar el máximo rendimiento a cada vuelo para tomar fotografías. "Con más calidad de imagen se pueden interpretar mejor las fotografías", destacó Darder. Además, también se utiliza un programa de inteligencia artificial que detecta los cambios que se han producido en el territorio desde la última actualización, que se hizo en el año 2015. Esta herramienta servirá para detectar nuevas edificaciones ilegales.
El gerente de esta dirección territorial, Pere Fuster, explicó la importancia de que la administración tenga un mapa actualizado, porque de esta forma se pueden ir observando los cambios que está sufriendo el territorio de Balears, provocados por la mano del hombre o por un efecto natural.
El conseller Mir explicó también que esta herramienta de información podrá ser utilizada tanto por las distintas administraciones, como por particulares. De hecho, destacó que la información que facilita puede ser básica ante operaciones de rescate, temas sanitarios, educativos o relacionados con el medio ambiente. También lo pueden utilizar los profesionales para la confección de proyectos relacionados con el territorio. No se descarta que esta información se podría utilizar como base de posibles infracciones urbanísticas.
La actualización cartográfica de la isla de Mallorca ha permitido reflejar los cambios en el territorio que supuso la gran tormenta que sufrió hace más de un año la localidad de Sant Llorenç. Las fotos reflejan las zonas dañadas, que se pueden comparar con las imágenes que se tenían antes de que se produjera este fenómeno meteorológico.
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