Todas las tiendas con la barrera bajada durante 24 horas y con el cartel de 'Se traspasa'. Esta medida, consistente en un cierre patronal (el equivalente a una huelga de empresarios), está siendo diseñada por las asociaciones de comercio de la isla, y además con la de restauración de Mallorca dispuesta a sumarse a la iniciativa. El objetivo es frenar algunas políticas adoptadas por las Administraciones que se consideran perjudiciales para el sector y reclamar su ayuda para hacer frente a una caída de las ventas que algunos califican de "catastrófica".
El plan nace de la patronal Afedeco y se explica por las tensiones que el sector comercial está manteniendo con el ayuntamiento de Palma, al considerar que sus responsables están tomando decisiones que perjudican claramente a la actividad empresarial al dificultar el acceso a los clientes en un momento en el que las ventas se han desplomado.
Pero al negociar esta iniciativa con la otra organización empresarial del ramo, Pimeco, ésta ha reivindicado que la protesta se extienda al conjunto de Mallorca, al considerar que es todo el sector isleño el que está sufriendo una caída en su facturación y precisa de ayuda por parte de las Administraciones competentes.
De este modo, la opción que se está barajando en este momento es convocar a finales de este mes o principios de marzo una primera jornada de cierre del pequeño comerciode Palma con la instalación en sus fachadas del citado cartel, para en jornadas posteriores y de forma escalonada ir extendiendo esta misma iniciativa por otros municipios mallorquines.
Los presidentes de Afedeco y Pimeco, Toni Gayà y Antoni Fuster respectivamente, coinciden plenamente en un punto: es necesario algún tipo de actuación para dar un giro a la política que se está desarrollando en materia comercial.
Pero además cuentan con refuerzos: el presidente de la asociación de restauración de Mallorca, Alfonso Robledo, también ha expresado su predisposición a que su sector se sume a la campaña de protestas al padecer igualmente una pérdida en sus ingresos.
Todos señalan que la situación de muchas de sus empresas se está deteriorando a marchas forzadas, y que desde enero algunas están teniendo que recurrir a pólizas de los bancos para obtener liquidez, cuando otros años esta medida se tomaba mucho más tarde para poder llegar a la Semana Santa. En este sentido, se vaticina que durante los próximos meses pueden registrarse cierres de negocios en ambos sectores.
La importancia de la medida que se plantea en estos momentos se refleja en que no cuenta con precedentes sectoriales desde el 19 de febrero de 1992, cuando también estas dos asociaciones de comercio organizaron un cierre patronal, con la colaboración de UGT y CC OO, en un intento de frenar la implantación de nuevas grandes superficies en Mallorca.
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